Educación en línea, clave para un México más seguro
Quien no tenga acceso a las nuevas tecnologías podría quedar aislado y perder infinidad de oportunidades, sobre todo si se trata de jóvenes infractores.
El 19 de mayo de 2015 en Chihuahua un niño de seis años de edad fue secuestrado, torturado y asesinado por cinco menores un poco más grandes que él. La noticia causó conmoción y se debatió porqué existen niños asesinos. Se culpó a los padres, se culpó a las autoridades, se culpó a los medios de comunicación, se culpó a la falta de prevención del delito en las políticas públicas.
“Tenemos que voltear a vernos a nosotros mismos y entender que somos una sociedad en donde cada uno de nosotros está victimizado y hemos decidido voltear la cara porque no queremos ver qué está pasando, no queremos darnos cuenta que los delincuentes tienen una historia, una realidad y si no los volteamos a ver México jamás será un país seguro” puntualiza Saskia Niño de Rivera, presidenta y cofundadora de Reinserta a un Mexicano A.C., asociación civil que rompe con los círculos de la delincuencia y la violencia trabajando con el sistema penitenciario.
Las nuevas tecnologías permiten el acceso a un sinfín de oportunidades informativas, laborales, recreativas, formativas, etc. Pero para ciertos sectores de la población el acceso a las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) no es tan sencillo.
Uno de ellos son los jóvenes que cometieron un delito y buscan reinsertarse en la sociedad.
La seguridad de un país se construye desde varios frentes y sin duda alguna el sistema penitenciario es uno de ellos, explica Saskia Niño de Rivera.
Una vez que están en la cárcel para la sociedad solo son delincuentes. “No debemos verlos así, debemos entender su entorno, esa es la óptica que nos importa destacar, porque un niño de 8 años que delinque es todo menos culpable” reflexiona Niño de Rivera, quien también funge como invitada permanente de la sociedad civil en el Consejo Nacional de Seguridad Pública.
“A veces la misma familia los pone a delinquir; tenemos el caso de un niño al que su familia lo obligó a buscar venganza por el asesinato de su padre a manos de un miembro del Cártel Jalisco Nueva Generación; es un panorama complejo, pero la sociedad debe entender que la reinserción es una oportunidad para arreglar lo que la sociedad está haciendo mal con esos niños y jóvenes”.
Reinserta trabaja con los menores de edad que están en internamiento. Ellos, independientemente de su delito, purgarán una pena de hasta cinco años. “Todos van a salir, no debemos olvidar eso, así que debemos lograr que en el tiempo que están encerrados se conviertan en buenas personas y no regresen a los delitos que cometían. Tampoco olvidemos a los niños que nacen en la cárcel” puntualiza Niño de Rivera.
Pero sin duda el momento más difícil llega cuando salen de los centros de internamiento. A esos jóvenes Reinserta los acompaña mediante un proceso personalizado que incluye becas educativas y acompañamiento psicológico para que se sepan parte de un cambio. “La mayoría tiene delitos irreparables, así que no basta con una reinserción, se necesita una concientización, que entiendan que lo que hicieron es irreparable”.
Pero ahora esos chicos —tanto los que están internados como los que ya son libres— no están recibiendo su tratamiento a consecuencia de la pandemia. “Los chavos viven en medios psicosociales muy complicados y nos están llamando por teléfono porque no pueden asistir a sus terapias y las necesitan. No hay que olvidar que muchos de ellos fueron reclutados por la delincuencia organizada y pueden volver a caer en la comisión de delitos”.
Ante esta realidad Reinserta —con apoyo económico y logístico de AT&T— implementó estrategias para mantener la conectividad y dar seguimiento al Modelo de Reinserción Social para Adolescentes y Jóvenes que, de la mano de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, proporciona las herramientas necesarias para que los jóvenes se alejen del delito.
“Podremos digitalizar nuestros programas —lo que nos permitirá llegar a más puntos del país sin necesidad de personal— y brindar talleres a distancia. Además, los chicos serán dotados de dispositivos, internet y todas las herramientas necesarias para que sigan construyendo una vida sana” cuenta Saskia Niño de Rivera.
En dos décadas el 90 por ciento de los trabajos requerirán habilidades digitales. Por ello resulta esencial ayudar a que la gente esté mejor preparada, acercando oportunidades de aprendizaje y eliminando barreras sociales, económicas, de género o cualquier otra índole, puntualizó Daniel Ríos, vicepresidente adjunto de asuntos externos de AT&T México.
Con un mayor uso de la tecnología para temas educativos, se podrían ver mejoras significativas:
Lo más importante de esta alianza es que podremos llegar más lejos y podremos seguir trabajando. Salir de la cárcel es de lo más difícil, la reclusión impacta fuertemente porque es una infancia interrumpida, así que si no los apoyamos en el proceso de salida los vamos a perder” finaliza Saskia Niño de Rivera.