Sostener tu cabeza en una posición inadecuada por cualquier cantidad de tiempo puede causar tensión en el cuello y comprimir las vertebras y esto puede tener un efecto indirecto a lo largo de tu espalda y columna provocando dolor e incomodidad.
Con la práctica regular, estos sencillos ejercicios te ayudarán a mantener la fuerza y la movilidad de tu cuello. Si tienes algún problema, los ejercicios también te pueden ayudar a recobrar el movimiento en la región del cuello y a controlar el dolor.
Realiza cada movimiento despacio repitiéndolo cinco veces, descansa un periodo corto de tiempo entre cada serie de movimientos. Si cualquiera de estos ejercicios te hace sentir incómoda o mareada, baja la velocidad, reduce la extensión del estiramiento u omite el estiramiento por completo.
Tu espina cervical (la porción de tu espina en la parte del cuello) soporta el peso de tu cabeza y protege los nervios que viajan desde la cabeza hacia el resto de tu cuerpo.
La cabeza humana promedio pesa entre 4 y 6 kilos (10-12 libras) –aproximadamente lo mismo que una bola de boliche pequeña– por lo que las vértebras del cuello se encuentran bajo una presión considerable aún cuando sólo estés de pie sin movimiento.
Tu cabeza también está posicionada ligeramente hacia adelante sobre tu columna en vez de directamente sobre ella, lo que significa que los músculos del cuello tienen que trabajar continuamente para equilibrar el peso de ésta.
Mirando de frente, rota tu cabeza hacia un lado hasta que no puedas girarla más. Regresa al centro, descansa un momento y rota la cabeza hacia el lado opuesto.
Inclina la cabeza hacia adelante hasta que tu barbilla toque tu pecho y tus ojos miren directamente hacia el piso. Regresa a la posición original, descansa un momento y luego lleva tu cabeza hacia atrás hasta que tus ojos miren hacia el techo.
Retrae la cabeza hacia atrás y baja ligeramente tu barbilla. Este ejercicio contrarresta la tendencia natural de asomar la cabeza hacia adelante demasiado.
Mantén la cabeza viendo hacia el frente y lleva tu oreja hacia abajo sobre tu hombro hasta que sientas el estiramiento a lo largo del lado opuesto de tu cuello. Regresa la cabeza a la posición original, descansa un momento y luego mueve la cabeza hacia el lado opuesto.
¿Sufres constantemente de dolores en el cuello?
Fuente: Huesos, músculos y articulaciones saludables. Reader’s Digest.
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