Por lo general se recomienda o desaconseja el uso del chupón basándose en experiencias personales y no siempre en evidencia científica.
Los bebés se llevan todo a la boca, pues a través de esta actividad descubren el mundo y se van adaptando a su medio ambiente. A ese reflejo primario se le conoce como succionar. Algunos bebés tienen un fuerte reflejo de succión. Algunos, incluso, se chupan los dedos antes de nacer ya que les proporciona un efecto placentero y de calma, razones por las cuales infinidad de padres confían tanto en el chupón, pero ¿es o no sano su uso?
A continuación, la coaching del sueño y fundadora de Zzleep my Baby, Liliana Amaro, enlista las ventajas y desventajas de su uso.
Previene la muerte súbita de cuna
Debido a la constante succión del bebé el sistema respiratorio se mantiene funcionando al 100 por ciento.
Menos llanto
Ayuda a evitar que el bebé/niño llore sin razón por mucho tiempo. Los mantiene en silencio y pacíficos.
Acelera el sueño
Ayuda a que el bebé/niño se quede dormido, puesto que es un reflejo natural ayuda al auto-arrullo.
Ayudan a aliviar las molestias durante el vuelo
Los bebés no pueden regular por voluntad propia los cambios de presión del aire tragando saliva o bostezando. El uso del chupete puede ayudarles.
Distracción temporal
Pueden ser útiles durante las inyecciones, análisis de sangre u otros procedimientos médicos.
Impide que un bebé entre en un estado profundo de sueño
Debido a la constante acción de succionar cada que para (porque se está quedando dormido) y el bebé siente que se va caer el chupón, se despierta.
Podría interferir con la lactancia materna
Aunque no está comprobado al cien por ciento, chupar un pecho es diferente a chupar un chupete o un biberón, y algunos bebés son muy sensibles a estas diferencias.
Algunos estudios sugieren que el uso temprano de mamilas se asocia a una disminución de la lactancia materna exclusiva, aunque no está del todo claro si las mamilas ocasionan problemas en la lactancia materna o sirven como solución a un problema ya existente.
Lo mejor es que el chupón sea usado cuando el bebé ya aprendió a mamar perfectamente el pecho, así que no debe usarse por lo menos el primer mes de vida.
Genera dependencia emocional
Si el uso del chupón se vuelve una dependencia para el bebé/niño y lo pide todo el tiempo —incluyendo cada vez que se le caiga por la noche—, comenzará a despertar cada hora y llorara para que acudas a dárselo.
Infecciones
El uso repetido del chupón y una mala higiene pueden generar infecciones en la boca del bebé. Los chupones usualmente tienen gérmenes y eso puede acarrear enfermedades al menor.
Para evitar otros efectos adversos del uso del chupete se recomienda, en todos los niños, limitar su uso hasta los 12 meses de edad, recomienda la Asociación Española de Pediatría.
“Solo los padres pueden decidir si quieren que su bebé use chupón o no, no se deben dejar influenciar por otras personas. El chupón no es necesario, pero si les facilitara la vida entreteniendo a su bebé” precisa Liliana Amaro.
Para retirarlo solo debes tomar la decisión. ¡No lo vuelvas una dependencia tuya más que la del bebé, suele suceder!
