Una de las bebidas que caracteriza a México en el mundo por su larga tradición y emblemático sabor es el mezcal, que ha destacado por preservar el proceso artesanal con el que se elabora.
Oaxaca, sin duda, es el referente inmediato cuando se habla de esta bebida de oro. Son varios los poblados de los Valles Centrales del estado que producen mezcal, lo que supone su principal actividad económica.
Una vez que los agaves o magueyes han sido seleccionados por su madurez y tras haber cortado las hojas quedando únicamente la piña o cabeza de la planta, el proceso de producción del mezcal pasa por cinco etapas antes de que pueda ser degustado.
La primera etapa corresponde a la cocción de las piñas normalmente realizada en hornos de tierra con capacidad de 3 o hasta de 9 toneladas. Este proceso toma de tres a cinco días aproximadamente.
En la siguiente fase se lleva a cabo la molienda del maguey cocido. Puede ser hecha a mano, golpeando trozos previamente cortados de la planta, o en una tahona, que es un espacio circular donde se depositan los trozos de maguey para que una piedra, también circular, triture las piñas con ayuda de un animal de carga.
La tercera parte comprende el periodo de fermentación, en donde la ahora molienda se almacena en tinas de madera de pino o encino con agua de manantial o destilada para obtener el líquido café llamado tepache. Según la temporada del año, la fermentación puede durar de 5 a 12 días.
La penúltima etapa es la llamada “doble destilación”: el líquido que resulta de la primera se destila nuevamente para que primero obtenga graduación alcohólica y, después, el cuerpo. El producto resultante es lo que se envasa y corresponde a la quinta etapa. En este último paso se distinguen cuatro clases de mezcal: joven, abocados, reposados y añejos.
La ruta Caminos del Mezcal es ideal para despertar todos nuestros sentidos, pues atraviesa majestuosos vestigios de la cultura originaria zapoteca como lo es Mitla, la llamada “Ciudad de los Muertos” y también Pueblo Mágico.
Geográficamente, esta ruta se despliega en la región de los Valles Centrales. Inicia en la Ciudad de Oaxaca y recorre los municipios de: Santa María del Tule, San Jerónimo Tlacochahuaya, Teotitlán del Valle, Tlacolula de Matamoros, San Pablo Villa de Mitla (Pueblo Mágico) y Santiago Matatlán, lugares que exponen magia en sus verdes paisajes, tradición en sus calles, monumentos y construcciones, y, desde luego, su inigualable sabor gastronómico.
La popularidad del mezcal continúa tomando fuerza hoy en día, logrando, incluso, que este año se celebre el primer foro mundial en torno a su tradición, cultura, tecnología negocios e innovación.
Dicho evento será organizado por el Gobierno del Estado de Oaxaca, a través de la Secretaría de Economía, y tendrá lugar en el Centro Cultural de Convenciones de Oaxaca del 12 al 14 de septiembre, donde acudirán 150 productores mezcaleros, 40 expositores y más de 300 marcas.
El principal objetivo es la promoción integral de la industria tanto en el interior como en el exterior de la República Mexicana: “Buscamos transmitir la historia y la cultura ancestrales que tiene el mezcal, mostrarle al mundo cómo se toma, cómo se produce y llevarlo a otro nivel”, dijo Juan Pablo Guzmán, Secretario de Economía de Oaxaca.
Así que agenda tu visita y conoce Oaxaca a través del mezcal, una bebida con mucha tradición.
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