¿El sexo de reconciliación es bueno o malo para tu relación?

Imagina esto: tú y tu pareja acaban de tener una gran pelea. Afortunadamente, han resuelto las cosas en su mayor parte y (con suerte) han llegado a algún tipo de resolución. Sin embargo, todavía te sientes desconectado/a y tal vez incluso inseguro/a acerca de dónde estás en estos momentos. Estas emociones pueden conducir a un comportamiento común: el sexo de reconciliación. Pero, ¿es esta la mejor manera de “arreglar” esa incomodidad residual?

Esto es lo que dicen los psicólogos John Gottman, Ph.D., y Julie Gottman, Ph.D. , autores de The Love Prescription y fundadores del Instituto Gottman.

¿Qué es el sexo de reconciliación?

Primero que nada aclaremos qué significa realmente el sexo de reconciliación, también llamado “sexo de disculpa”. Julie Gottman señala que muchas parejas se sienten distantes después de una gran pelea, algo con lo que muchas personas pueden identificarse. “La distancia crea miedo, crea inseguridad y crea ansiedad”, agrega. Estas emociones pueden hacer que cualquiera de los dos sienta la necesidad de reconciliarse de inmediato, y el sexo es una forma en que las parejas tienden a sentirse cercanas y verdaderamente amadas, explica.

Por supuesto, que el sexo no es importante para todas las relaciones, pero especialmente si tú y tu pareja priorizan la intimidad física , entonces podrá parecer que es lo único en lo que tanto tú como tu pareja podrán estar de acuerdo en ese momento, pero ¿realmente va a curar la herida abierta?

¿Es bueno o malo para la relación?

Participar en el sexo de reconciliación no es intrínsecamente malo para la relación, pero debe combinarse con al menos otra forma de tranquilidad. De hecho, cuando se habla de parejas que se involucran en el sexo de reconciliación, Julie dice que en realidad pueden necesitar un consuelo verbal o algún tipo de consuelo físico que no involucre el dormitorio.

Para resumir: el sexo no está completamente fuera de la mesa, pero no debería ser la única forma de disculpa o tranquilidad. Entonces, ya sea antes o después de meterte en la cama y comenzar a tener relaciones sexuales, usa otras palabras y acciones para recordarle a tu pareja que la amas. Para una conexión aún mayor, abrácense después. John hace referencia a un estudio que analizó a 70,000 personas en 24 países (detallado en el libro The Normal Bar ) e identificó patrones comunes entre las parejas que informaron tener una gran vida sexual y las que no.

¿Uno de los hallazgos? “De las parejas que no se acurrucaron en todos esos países, el 96 % de ellas tuvo una vida sexual horrible. Solo el 4 % de las que no se acurrucaron tuvieron una vida sexual excelente”, señala John. Basta decir que los abrazos pueden ser tan importantes para tu vida sexual como el acto en sí, tanto para la reconciliación como para una vida sexual saludable en general.

Con información de The Verdict Is In: Is Make-Up Sex Good Or Bad For Your Relationship?