La campana extractora es el héroe silencioso de tu cocina. Absorbe humos, vapores y, sobre todo, esa grasa molesta que se genera al cocinar. Pero con el tiempo, toda esa acumulación no solo le da un aspecto descuidado, sino que también reduce su eficacia, acorta su vida útil y puede generar olores desagradables. ¡Nadie quiere eso en su espacio culinario!
La buena noticia es que no necesitas productos químicos abrasivos, ni horas frotando hasta el cansancio, para dejarla impecable y brillante. Existe un truco casero, sencillo y seguro para ti y tu familia, que utiliza productos que probablemente ya tienes en tu despensa y que gracias al portal Mejor con Salud te lo compartimos. ¿Listo para darle una nueva vida a tu campana extractora? ¡Te explicamos cómo hacerlo paso a paso!
El primer paso es preparar el terreno. El vapor será tu mejor aliado para aflojar esa grasa pegada, tanto en los filtros como en el interior y exterior de la campana.
Los filtros son el corazón de tu campana y donde más grasa se acumula. ¡Es hora de darles un buen baño!
Mientras los filtros se remojan, es el momento perfecto para atacar la superficie de la campana.
La clave para una campana impecable es la limpieza constante. Pequeñas acciones regulares te ahorrarán grandes esfuerzos en el futuro:
Estas pequeñas rutinas harán que la limpieza profunda sea mucho más rápida y sencilla cuando la necesites. ¡Tu cocina te lo agradecerá!
Una campana limpia, una cocina feliz
Mantener tu campana extractora limpia no es solo una cuestión de estética; es vital para su eficiencia, durabilidad y para mantener un ambiente agradable en tu cocina. Con estos sencillos pasos y el poder de productos caseros como el vinagre, el bicarbonato y el limón, puedes deshacerte de la grasa acumulada sin necesidad de químicos agresivos. Prioriza la limpieza regular para que tu campana funcione siempre al máximo y tu cocina huela siempre a hogar, no a grasa.
¿Probaste estos trucos para limpiar tu campana? ¡Cuéntanos tu experiencia en los comentarios!
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