El catador oficial de una fábrica de licores muere. Su jefe pone un anuncio solicitando candidatos para el puesto, y al día siguiente...
En la víspera de una importante festividad religiosa, una abuela charla por teléfono con uno de sus nietos, que irá a visitarla más tarde.
—Cuando llegues al edificio, oprime el botón 2-B con el codo —le dice ella—. Te abriré desde el apartamento. El ascensor está a mano derecha. Entra y, con el codo, oprime el botón marcado con el 2.
—No te preocupes, abuelita, no creo tener ningún problema —responde el nieto—. Pero tengo una duda: ¿por qué debo oprimir todos los botones con el codo?
A lo que la anciana contesta:
—¿Cómo? ¿Piensas venir a visitarme con las manos vacías?
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¿Han notado que los conductores que van más despacio que ustedes son unos idiotas, y los que van más aprisa son unos locos endiablados?
George Carlin, comediante
El catador oficial de una fábrica de licores muere. Su jefe pone un anuncio solicitando candidatos para el puesto, y al día siguiente se presenta un borrachín en la puerta de la fábrica. Con la esperanza de deshacerse de él, el jefe le da una copa de vino para que lo cate.
—Es un moscatel de tres años, cultivado en una ladera con orientación al norte y madurado en toneles de acero —dictamina el sujeto ebrio.
—¡Así es! —exclama el jefe, y le da una copa de otro vino.
—Cabernet, de ocho años. Las cepas son de una ladera orientada al suroeste, y se maduró en barriles de roble —señala el beodo.
—¡Acertó otra vez! —comenta el jefe, asombrado.
Luego sonríe maliciosamente y le dice algo al oído a su secretaria, que sale de la habitación y regresa con una copa llena de orina.
El borrachín la prueba, hace una pausa y luego da su veredicto:
—Es rubia, de 26 años, con un embarazo de tres meses que se originó justo en esta oficina. Y, si no me dan el empleo, ¡le voy a contar a todo el mundo quién es el padre!
Enviado por Elfas Kaneba, Reino Unido
Un programador informático se dispone a ir al supermercado.
Su esposa le dice:
—Compra un litro de leche, y si hay huevos, trae una docena.
El programador se va, hace las compras y regresa a casa.
—¿Por qué compraste 12 litros de leche? —le pregunta su esposa, muy enojada, al ver lo que compró.
—¡Pues porque sí había huevos!
—exclama el programador.
Hoy cené una pizza libre de gluten, sin lactosa y baja en carbohidratos… Era un tomate crudo.
@Samir
Dos bebés están sentados en sus cunas. De pronto, uno de ellos le pregunta al otro:
—Oye, ¿tú eres niño o niña?
El otro bebé se encoge de hombros y responde:
—No sé cuál es la diferencia.
—Yo sí —dice el primero, y entonces baja cuidadosamente de su cuna y se encarama en la otra.
Luego desaparece debajo del cobertor y, al cabo de unos segundos, vuelve a salir.
—Tú eres niña, y yo, niño —dice.
—¿Cómo lo sabes?
—¡Muy fácil! Tú tienes zapatitos rosas, y yo, azules.
