Entre niños: Mi hijo quería mucho a su mascota
Un pez. Lo cuidaba y alimentaba con diligencia, mañana y noche. Un día, mientras el niño estaba en la escuela, el pez murió...
Durante una reunión familiar, una valiente niñita metió un pie en la piscina, que estaba demasiado fría para nadar en ella.
“¡Vaya!’; exclamó sorprendida. “¡Parece un chicle de menta!”.
-NANCY COLE, Canadá
Mi hijo quería mucho a su mascota, un pez. Lo cuidaba y alimentaba con diligencia, mañana y noche. Un día, mientras el niño estaba en la escuela, el pez murió, así que decidí echarlo al escusado y tirar de la cadena. Cuando mi hijo volvió a casa le informé del inesperado deceso. Quedó devastado; no había palabras que pudieran consolarlo.
Después de un rato, me acerqué a preguntarle: –¿Por qué lloras tanto, cariño?
–¡Porque yo quería tirar de la cadena! -gritó el pequeño.
–JUDITH PARNETT, Canadá
Casi al término de mi embarazo de gemelos, un sobrino de cuatro años observó con curiosidad mi abultado abdomen. Caminó a mi alrededor un par de veces, viéndolo desde todos los ángulos. Por fin se detuvo y dijo: “Oye, tía, ¿qué es lo que tienes en los bolsillos?”.
-IRENE FIX, Canadá
No sé qué tipo de vida pensé que tendría a esta edad, pero en definitiva no era ver a un niño pequeño semidesnudo lamiendo el betún de un pastelillo, recostado sobre mi pecho a las 5:45 de la mañana.
-@DADANDBURIED
Un día escuché por casualidad una conversación entre mi madre y mi hijo Tristan, entonces de seis años.
-¿Cuándo es tu cumpleaños? preguntó mi mamá.
El 11 de mayo -repuso el pequeño.
-¿De qué año? -indagó mi madre.
-¡De todos los años! exclamó el niño.
–WENDY JAGIELLO, Canadá
Yo: muero
Mis hijos: usando la tabla ouija*
H-O-L-A M-A-M-Á ¿Q-U-É V-A-S- A – H-A-C-E-R D-E C-E-N-A-R?
-@CARBOSLY
Habrá un momento en mi vida en el que mi hijo me verá y pensará: “¡Mi mamá lo sabe todo!”. Luego llegará al sexto grado de matemáticas y le diré: ”Bueno, aquí nos separamos”.
-@LURKATHEMoM