¿Es bueno tu doctor? Aquí tienes 6 señales para quedarte con él (o no)
¿Cómo evaluar a tu doctor? Lo que un paciente quiere es sentirse escuchado y recibir un consejo que puede ayudar más que una pastilla.
Cuando se trata de recibir cuidado médico de calidad, la experiencia es el factor más importante, dice David Norris, CEO de MD Insider, una compañía que evalúa a los médicos dependiendo de sus datos de rendimiento. Ya sea que estés manejando una condición de por vida como la diabetes o necesitas un tratamiento específico como una cirugía de rodilla, un doctor que se especialice en esa cosa particular vale su peso en oro, dice. Y olvida todas esas placas elegantes en la pared; Norris dice que sus datos no encontraron correlación entre asistir a una escuela médica cara de primer nivel y una solo competente.
“Al final, se trata de cuantas veces han hecho (algo), ya sea diagnosticar o una cirugía o lo que sea”, dice. “Mientras mas veces lo hayan hecho, en general, son mejores”.
Idealmente, los doctores están ahí para ayudarte a mejorar. Mientras que existen algunas condiciones que no lo harán y sólo necesitan ser monitoreadas, la mayoría del tiempo puedes esperar ver al menos alguna mejora.
“Uno de los indicadores más grandes de que un doctor no es bueno es el número de veces que un paciente ha sido readmitido o ha tenido que repetir el procedimiento o tratamiento”, dice Norris.
Google podría ser el primer recurso al cual recurrir cuando busques un buen doctor pero esa podría ser la manera menos confiable de encontrar uno, dice Norris.
Su compañía ha analizado cientos de miles de reseñas en línea y las ha empatado con los datos de rendimiento reales del médico. ¿Su conclusión? “No hemos encontrado correlación entre las reseñas de los pacientes y la aptitud médica”, explica.
“Las personas que han tenido experiencias negativas son más probables de dejar reseñas y a menudo se quejan sobre cosas que no tienen relevancia con su cuidado médico, como baños o lugares de estacionamiento“.
Así que olvida lo que todos están diciendo en línea, la única opinión que debería importar es la tuya.
Los buenos modales en el comportamiento con un enfermo es un gran extra pero no es lo más importante cuando se trata de recibir el mejor cuidado médico, especialmente con los especialistas. “Que sea un buen doctor no significa que sea un doctor agradable”, dice Norris, “pero al final estás mejor con el cirujano que es técnicamente mejor que con el que es más simpático”.
Si resulta que tu doctor es agradable y bien calificado, has encontrado un verdadero ganador. Pero no te quedes con alguien solo porque tienen química en lugar de por sus aptitudes.
La transparencia es uno de los atributos que los pacientes se encuentran más tranquilizantes en sus proveedores de cuidado de salud, pero uno de los más difíciles de encontrar, según Norris.
“La honestidad y transparencia crean confianza, lo cual lleva a mejores resultados con los pacientes”, dice.
¿Un ejemplo? Muchos doctores anuncian qué realizan un procedimiento en particular o tratan una condición específica, pero muchos menos brindan evidencia de cuántas veces lo han hecho o lo han tratado y como ha resultado. Definitivamente quieres un doctor en el último campo, aunque muestre que no es perfecto.
Hacerte todos los exámenes que existen podría hacerte sentir que tu doctor es proactivo pero esa sensación de seguridad viene con un precio, literalmente. “Contrario a la creencia popular, más exámenes no resulta generalmente en mejores resultados“, dice Norris.
“A menudo se ordenan exámenes porque tienen un enlace financiero u otras razones de negocios para hacerlo, como que el doctor es dueño de un porcentaje en cierta compañía o solamente acaba de comprar una máquina nueva muy cara”.
Los doctores son vulnerables a la presión de grupo también y esto es incluso más cierto en la era del Internet. Algunos doctores tienen tanto miedo a reseñas en línea negativas o a molestar a un paciente que permiten que el paciente los presione a hacer algo que no piensan que es lo mejor.
Por ejemplo, muchos pacientes quieren antibióticos para los síntomas de gripe y resfriados aunque mucha información ha demostrado que no son efectivos y pueden empeorar la crisis al hacerla resistente a los antibióticos. Pero algunos doctores cederán a estas demandas sólo para aplacar al paciente.
Esto no significa que no debas hacer preguntas o hacer que se sepan tus preocupaciones, sino que tus demandas no deberían sobrepasar su experiencia. Un doctor que realmente se preocupa por ti no tendrá miedo a decirte cuando algo no sea para tu mejor interés.
La persona promedio tiene que esperar al menos media hora en la consulta antes de ver a su doctor y luego la consulta promedio dura menos de 15 minutos. Incluso peor, un estudio separado encontró que los pacientes podían hablar solamente durante 12 segundos antes de ser interrumpidos. Pero sólo porque esto es el estándar no significa que deberías aceptarlo.
Esta mentalidad de puerta giratoria deja a los pacientes frustrados y, más a menudo con una receta, en lugar de sentirse escuchados y recibir consejo sobre cambios en su estilo de vida que podría ayudarlos más que una pastilla.
Un buen doctor respetará su agenda, se tomará el tiempo para escucharte, y te dejará terminar tus oraciones, así podrás sacar mayor provecho a tus consultas médicas.
Vivimos en un mundo 24/7 y estar confinado a horas de oficina puede significar inconveniencia en el mejor de los casos y problemas serios en el peor.
Muchos doctores están ofreciendo ahora horarios alternos (como horas en fin de semana), llamadas en línea, resultados de pruebas en línea y acceso por e-mail para ayudar a que los pacientes reciban el cuidado que necesitan cuando lo necesitan.
Estas conveniencias del siglo XXI no son necesariamente un factor decisivo pero ¡por supuesto que facilitan las cosas!
“Cuarenta por ciento de los pacientes están mal diagnosticados inicialmente“, dice Norris. La medicina no es una ciencia exacta y es fácil cometer errores.
Una de las mejores maneras de evitar esto es tener un segundo (o tercer) par de ojos en el paciente. Un buen doctor te animará a buscar más información y otros opiniones médicas. No confíes en un doctor que te diga que es el único con respuestas y que no deberías cuestionarlo.
La medicina es una profesión que cambia constantemente, con información nueva, investigación, tecnología y tratamientos emergiendo todo el tiempo. Los doctores buenos se quedarán al frente de desarrollos en su campo y estarán dispuestos a aprender más sobre técnicas nuevas.
Tomado de rd.com 6 Signs Your Doctor Is a Keeper (And 5 Signs They’re Not!)