Además de ser importante en la alimentación, la espinaca constituye puede ayudar en el cuidado de la piel y los signos del envejecimiento.
La espinaca, además de ser un vegetal de sabor único e inigualable, también puede ser parte de tratamientos para el cuidado de la piel y el envejecimiento.
Reconocida por sus aportes de nutrientes, constituye una de las mejores fuentes de rejuvenecimiento natural.
Puedes utilizar este alimento natural y ayudar a mejorar el aspecto físico, reduciendo arrugas, al mismo tiempo trata de evitar estos hábitos que las provocan y que no sabías.
El cuidado de la piel es una de las mayores preocupaciones conforme pasan los años. Pues se ve amenazada por distintos factores, la edad provoca una piel menos elástica y frágil; la exposición a luz ultravioleta acelera el proceso de envejecimiento natural; el tabaquismo se encarga de atacar directamente al colágeno; y también las expresiones faciales repetitivas que se encargarán de producir líneas finas y arrugas.
La espinaca aporta grandes cantidad de vitamina A, que actúa moderando la producción de sebo en los poros, y también en los folículos pilosos.
Otra de las virtudes es la estimulación del crecimiento capilar, indicado por especialistas para las personas que sufren la caída del cabello.
Y como si fuera poco, sus hojas verdes son ricas en vitamina C, que se encargan de formar el colágeno, brindando flexibilidad, elasticidad y resistencia en la piel, beneficiando su cuidado.
Con información de Terra.
