Estas son las diferentes etapas de la vida de un gato
La vida de un gato se divide en seis fases, cada una de ellas con sus propias características, y es importante saberlas para cuidarlos mejor.
Las necesidades de los gatos van cambiando a lo largo de su vida, y es importante que si tienes un gato como mascota, conozcas cuáles son sus etapas de vida. Así podrías entender como responder a las necesidades del animal de una forma más eficiente.
Esto abarca desde el nacimiento hasta los seis meses de vida. Se trata de una etapa muy delicada, en la que el gato es muy susceptible de sufrir enfermedades como la otitis ya que sus sistema inmunitario todavía no está completamente desarrollado. Hay que prestarle mucha atención al gato para que no desarrolle problemas de comportamiento.
Este es el mejor momento para introducirlos en ambientes donde hay niños u otras mascotas. Además de lograr educarlo a que se deje cortar las uñas, cepillar, abrir la boca para dar medicinas, limpiar los dientes, entrar y estar tranquilos en la jaula y al transportarse en auto.
Entre los siete meses y los dos años, un gato es joven. En esta etapa, son comunes las enfermedades infecciosas. Los gatos jóvenes son curiosos y muy activos, así que es esencial estimularles. Hay que controlar mucho su dieta para que no sufran obesidad.
En esta etapa es muy importante el juego ya que, de no hacerlo, el gato puede empezar a manifestar agresividad hacia otros gatos o incluso otras mascotas o personas. En esta etapa alcanzan la madurez sexual.
En la adultez, cuando el gato tiene entre tres y seis años, hay que ser muy cuidadoso con las dosis de refuerzo de las vacunas. Asegúrate que reciba el cuidado veterinario correcto ya que, al ser adultos jóvenes, se suele asumir que están sanos, lo que puede retrasar el control médico y eventual tratamiento de una condición seria.
Muchos gatos adultos sufren problemas dentales, así que es conveniente consultar con el veterinario sobre la limpieza dental.
A partir de los siete años de edad, los gatos poco a poco empiezan a hacerse mayores. La probabilidad de sufrir enfermedades como la hipertensión o la diabetes se dispara.
El juego y actividad física empiezan a decrecer y, generalmente, si no lo controlamos, llevar a un aumento de peso. Al igual que con los gatos adultos, no se debe descuidar el control veterinario y es ideal empezar con análisis de laboratorio como controles preventivos de salud.
Cuando el gato cumple once años, se hace adulto mayor. Es fácil darse cuenta de que se encuentra en esta etapa porque duerme mucho más y dedica menos tiempo a acicalarse. El gato tiene el equivalente a unos 70 años humanos.
También es posible que su sentido del olfato ya no sea tan bueno como antes. En esta etapa, los dueños deben centrarse en proporcionarle al animal la mejor calidad de vida posible. Es recomendable que sean revisados mínimo 2 a 3 veces por año por el Médico veterinario para evitar cualquier problema mayor.
Se considera que un gato es anciano cuando tiene más de quince años. Aumenta exponencialmente el riesgo de sufrir enfermedades relacionadas con la edad.
Hay que estar atentos ante cualquier cambio que pueda indicar que el gato sufre demencia senil, como maullido constante (esto es lo que significan los ruidos que hace tu gato), desorientación y confusión. Pueden manifestar cambios en su comportamiento (esconderse, orinar o defecar fuera de la caja, vocalización, etc.) a consecuencia de dolor o ciertas enfermedades. Deben ser evaluados regularmente debido a la edad avanzada.
Con información de Vetarinaria Rubio