Estos hábitos dañan tus huesos, cuídalos y evítalos
Cuando hablamos de proteger tus huesos pensamos en calcio y ejercicio, pero existen algunos hábitos que los dañan de manera importante a la larga.
Uno de los sistemas más sorprendentes dentro del cuerpo humano es sin duda el óseo, pues los huesos proporcionan un marco corporal, protegen a los órganos vitales, como el corazón, e incluso producen sangre, así que más nos vale cuidarlos.
Cuando hablamos de proteger los 206 huesos que forman el sistema óseo de un adulto pensamos en calcio y ejercicio, pero existen algunos hábitos que parecieran inocuos para la salud ósea, pero que los dañan de manera importante a la larga. Aquí te dejamos algunos ejemplos:
Algunas medicinas inciden en la pérdida de densidad ósea, así que se eleva el riesgo de sufrir porosidad en los huesos y con ello hay más peligro de fractura.
El uso prolongado de medicamentos corticoesteroides como la prednisona, la cortisona, la prednisolona y la dexametasona es dañino para los huesos.
Otros medicamentos que podrían aumentar el riesgo de osteoporosis son:
Por esta razón, es importante que consultes a tu médico sobre su uso de acuerdo a tu historia clínica.
Poca gente pensaría que esa postura podría ser mala para los huesos ¿no? pero así es. En esa pose el propio peso del cuerpo genera daños, pero la solución es sencilla: alterna las piernas (adelanta un pie) para que el cuerpo obtenga el descanso que necesita mientras esperas.
El consumo excesivo de sal incide en la eliminación de calcio mediante la orina, lo que podría generar una deficiencia de este mineral. Si no se controla la ingesta los huesos corren riesgo, pues el sodio dificulta la absorción del calcio.
Si eres de los que carga con la lap top y mil cosas más en la bolsa o maleta es mejor que aprendas a elegir con qué salir de casa, pues el exceso de peso puede alterar la estructura ósea, causar epicondilitis y dolores en brazos, hombros y manos.
No cargues más de 10 kilogramos sobre tus hombros y elige bolsas o maletas de asas gruesas, preferiblemente acolchadas y que sean pegadas al cuerpo para mayor soporte y evitar balanceos.
Aléjate de las carteras muy grandes y con asas muy delgadas o muy largas, así como de los bolsos cruzados.
Correr es un deporte completo y barato, pero algunos de sus beneficios desaparecen si se practica en lugares inadecuados.
Corre sobre superficies intermedias como parques o de plano sobre tierra, pero aléjate del asfalto o concreto y hasta de la arena, pues así evitarás que tus cartílagos se resientan y sufran lesiones.
Sabemos que la falta de sueño es mala, pero ¿también afecta la calidad de los huesos? Pues sí. Diversos estudios demostraron que un descanso incompleto en las ratas detenía la formación del tejido óseo; además, sus huesos perdían densidad.
Al parecer dormir mal ocasiona que nuestros huesos no se reparen eficazmente.
Aquí no sirven los extremos: ni muy altos ni completamente planos. Los especialistas dicen que el tacón inocuo es aquel que no supera los 3 centímetros.
Cuando se usan tacones altos se obliga al cuerpo a desplazarse hacia delante, así que los dedos y el antepié son los que deben soportar todo el peso corporal. Por eso las mujeres que usan ese tipo de zapatos padecen de dolores en rodillas y columna.