La tensión arterial, también conocida como presión arterial, es una medida de la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias. Es un indicador vital de la salud cardiovascular y su medición regular es fundamental para la detección y prevención de enfermedades.
¿Cuáles son los valores normales de la tensión arterial?
Se considera que la tensión arterial es normal cuando se encuentra por debajo de 120/80 mmHg (milímetros de mercurio).
- Presión arterial sistólica: Es el valor superior y se refiere a la presión que ejerce la sangre cuando el corazón late.
- Presión arterial diastólica: Es el valor inferior y se refiere a la presión que ejerce la sangre cuando el corazón está en reposo.
Clasificación de la tensión arterial
El American College of Cardiology (Colegio Estadounidense de Cardiología) y la American Heart Association (Asociación Americana del Corazón) dividen la presión arterial en cuatro categorías generales.
- Presión arterial normal. La presión arterial es menos de 120/80 milímetros de mercurio.
- Presión arterial elevada. El valor superior varía entre 120 y 129 milímetros de mercurio y el valor inferior está por debajo (no por encima) de 80 milímetros de mercurio.
- Hipertensión de etapa 1. El valor superior varía entre 130 y 139 milímetros de mercurio o el valor inferior está entre 80 y 89 milímetros de mercurio.
- Hipertensión de etapa 2. El valor superior es 140 milímetros de mercurio o más, o el valor inferior es 90 milímetros de mercurio o más.
La presión arterial elevada se considera una categoría, no una afección propiamente dicha como la presión arterial alta (hipertensión). Sin embargo, la presión arterial elevada tiende a empeorar con el tiempo, a menos que se controle correctamente. Por eso, es importante verificar y controlar la presión arterial con regularidad.
Si la presión arterial alta y la hipertensión no se regulan, aumenta el riesgo de infarto de miocardio y accidente cerebrovascular. Ciertos estudios sugieren que la hipertensión arterial a largo plazo puede provocar un deterioro cognitivo, que afecta a la memoria, el lenguaje, el pensamiento y el juicio.
¿Por qué es importante controlarla ?
La tensión arterial alta es un factor de riesgo importante para enfermedades cardiovasculares como:
- Infarto de miocardio.
- Accidente cerebrovascular.
- Enfermedad renal crónica.
- Aneurismas.
Factores de riesgo
Los factores de riesgo de la presión arterial elevada incluyen los siguientes:
- Edad: La tensión arterial suele aumentar con la edad.
- Sexo: Los hombres suelen tener la tensión arterial más alta que las mujeres.
- Genética: La predisposición genética puede aumentar el riesgo de hipertensión.
- Dieta: Una dieta rica en sodio y baja en potasio puede aumentar la tensión arterial.
- Peso: El sobrepeso y la obesidad son factores de riesgo de hipertensión.
- Actividad física: La falta de actividad física puede aumentar la tensión arterial.
- Tabaquismo: Fumar cigarrillos puede aumentar la tensión arterial.
- Consumo de alcohol: El consumo excesivo de alcohol puede aumentar la tensión arterial.
*Cualquiera puede tener presión arterial elevada, incluso los niños.
¿Cómo puedo mantener sana la presión arterial?
Existen diferentes medidas que puedes tomar para controlar tu tensión arterial:
- Llevar una dieta saludable: Reduce el consumo de sodio y aumenta el consumo de potasio, frutas, verduras y cereales integrales.
- Mantener un peso saludable: Si tienes sobrepeso u obesidad, perder peso puede ayudarte a reducir la tensión arterial.
- Realizar actividad física regularmente: Se recomienda realizar al menos 30 minutos de actividad física moderada la mayoría de los días de la semana.
- Dejar de fumar: Fumar cigarrillos aumenta la tensión arterial.
- Limitar el consumo de alcohol: El consumo excesivo de alcohol puede aumentar la tensión arterial.
- Tomar medicamentos: Si tu médico lo indica, puedes tomar medicamentos para controlar la tensión arterial.
Recuerda: La información proporcionada en este artículo no sustituye la consulta médica. Si tienes dudas o preocupaciones sobre tu tensión arterial, consulta con tu médico.
Fuente: Clínica Mayo