Evita propagar gérmenes, deja de hacer estas acciones

Mandar mensajes mientras estás en el baño

Cuando la naturaleza llama los gérmenes (¡incluso la materia fecal!) se liberan en el aire y pueden aterrizar en todas las superficies… como tu teléfono. Incluso si te lavas las manos antes de salir del baño, esa bacteria todavía se queda en la pantalla.

Deja tu teléfono en otro lado la próxima vez que vayas al baño.

Usar jabón de barra

Claro, el jabón limpia las manos, pero las barras en realidad son un lugar de cultivo para los gérmenes cuando son utilizadas por varias personas. Opta por tener jabón líquido en su lugar.

Compartir toallas de baño

Compartir es demostrar interés, excepto cuando se trata de gérmenes. Hazle un favor a tu familia y dale a cada miembro de la casa su propia toalla de mano para el baño.

Lava las toallas al menos una vez a la semana, o mas, si tienes niños pequeños para evitar la acumulación de bacterias en la tela.

No lavar las manos el tiempo suficiente

La cantidad de tiempo óptima que debes pasar lavándote las manos (con agua tibia y jabón) para limpiarlas es de 20 a 30 segundos. Eso es el tiempo que te tardas en cantar “Feliz cumpleaños” dos veces. Si, es en serio.

Secarse las manos con el secador de aire

¿Estas usando un baño público? Es posible que desees omitir el secador de aire para secarte las manos. Te explicamos la razón: un estudio publicado en Applied and Environmental Microbiology descubrió que pueden dispersar las bacterias en todo el baño, incluso en tus manos recién lavadas. ¡Qué asco!

¿El mejor plan de acción cuando están en un baño público? Usa toallas de papel(y úsalas para abrir cualquier puerta para evitar que se acumulen los gérmenes al salir). Si no hay toallas de papel, solo sacude las manos.

Dejando la tapa del inodoro arriba cuando le jalas

¡Esa tapa está ahí por una razón! De acuerdo con el American Journal of Infection Control, cuando se descarga el contenido del inodoro se desplaza, enviando un aerosol al aire que contiene bacterias microscópicas. Si no cierras la tapa del inodoro, la bacteria puede contaminar tus manos, las superficies del baño e incluso objetos como cepillos de dienes.

Masticar plumas

¿Sabes dónde ha estado esa pluma? Incluso si lo sabes, tu boca probablemente no debería ser uno de esos lugares. Si el bolígrafo te pertenece, eso significa que tus manos, tal vez, no tan limpias, lo han tocado, y como masticar un bolígrafo suele ser un hábito nervioso que haces de forma automática, es probable que no hayas tenido en cuenta la limpieza de la pluma, o de tus manos. Además morderlo no es nada bueno para tus dientes.

Abrir cosas con los dientes

Si, a veces, cuando no puedes abrir un paquete, puede parecer más conveniente (y en ocasiones más efectivo) comenzar a utilizar tus dientes. Sin embargo, esto no solo puede ser potencialmente dañino para ellos, sino que también puede propagar gérmenes.

Además de los de tu propia boca que se transfieren al paquete, también está haciendo contacto con los que ya estaban presentes en el envase.

Soplar tus velas de cumpleaños

A menos que tu deseo sea tener gérmenes en todo tu pastel, es posible que desees reconsiderar esta tradición. Cuando soplas las velas, liberas bacterias que han estado dentro de tu boca ¿y adivina a dónde van? Hacia el objetivo del aire: la superficie de tu pastel.

Si bien existe una pequeña posibilidad de enfermarse de estos gérmenes, es muy desagradable especialmente por que un estudio demostró que soplar velas causa que la cantidad de bacterias en el pastel aumente un 1,400 por ciento.

Comer en tu escritorio

Ahora tienes una excusa para levantarte, caminar y tomar un descanso a la hora de la comida. No es para que te de asco, pero es muy probable que el teclado de tu computadora contenga gérmenes peligrosos, a menos que lo limpies con regularidad.

Si comes en la misma superficie que tu teclado, corres el riesgo de ingerir esos gérmenes que definitivamente no estaban en el menú.

Tomado de rd.com 10 Germ-Spreading Habits to Give Up Now