La higiene pulmonar , anteriormente conocida como toilette pulmonar , se refiere a un conjunto de ejercicios y procedimientos diseñados para limpiar las vías respiratorias de mucosidades y otras secreciones.
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Mantener los pulmones despejados garantiza que el cuerpo reciba suficiente oxígeno y que el sistema respiratorio funcione de manera eficiente. A continuación te compartimos información de Healthline sobre este tema y cómo este enfoque puede formar parte de un plan de tratamiento para varias afecciones que afectan la respiración, como:
- Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica ( EPOC )
- Asma
- Bronquitis
- Fibrosis quística
- Neumonía
- Enfisema
- Distrofia muscular
Existen varios métodos de higiene pulmonar que pueden realizarse en casa o en consulta médica. A continuación, te explicamos algunos de los más comunes y cómo sacarás el máximo provecho.
Ejercicios de respiración
Los ejercicios de respiración ayudan a relajar las vías respiratorias tras un ataque de tos o a despejarlas sin necesidad de grandes esfuerzos. Estos son dos de los más efectivos:
Respiración relajada
Para practicar la respiración relajada, sigue estos pasos:
- Relaje el cuello y los hombros.
- Coloca una mano sobre tu abdomen.
- Exhala lentamente por la boca.
- Inhala profundamente, asegurándote de mantener los hombros relajados.
Repite estos pasos cuatro o cinco veces al día para obtener mejores resultados.
Técnica de inhalación
Este ejercicio implica hacer un “huff” , es decir, exhalar de forma intensa por la boca, simulando que estás creando niebla en un espejo. Existen dos maneras de hacerlo:
- Inhala de forma normal y exhala con la mayor fuerza posible.
- Toma una respiración profunda y exhala con pequeños resoplidos cortos.
Esta técnica es especialmente útil para despejar las vías respiratorias sin forzar un acceso de tos intenso.
Aspiración
La aspiración se realiza utilizando un tubo delgado y flexible llamado catéter de succión . Este catéter se conecta a un dispositivo que extrae el aire a través del tubo, eliminando las secreciones de las vías respiratorias. Aunque el procedimiento puede resultar incómodo, solo toma entre 10 y 15 segundos. En caso de requerir varias sesiones, se harán pausas entre cada una para mayor comodidad.
Espirometria
La espirometría es una técnica que utiliza un dispositivo llamado espirómetro incentivado para fortalecer y controlar la respiración. El aparato tiene un cilindro transparente con un tubo flexible y una boquilla a través de la cual se exhala e inhala.
A medida que exhalas, una pequeña bola o indicador sube y baja dentro del dispositivo, dependiendo de la cantidad de aire que puedas exhalar. Un medidor adicional te permite controlar la velocidad de tu exhalación. Los pasos para su uso general son los siguientes:
- Sostén el espirómetro en tus manos.
- Coloca la boquilla en tu boca y sella bien los labios.
- Inhala lenta y profundamente.
- Mantenga la respiración el mayor tiempo posible.
- Exhala lentamente.
Se recomienda realizar esta técnica aproximadamente 10 veces por hora. La espirometría es útil para quienes están recuperándose de una cirugía o tienen afecciones respiratorias como neumonía.
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Percusión
La percusiones , también conocida como cupping o palmoteo, consiste en golpear suavemente el pecho o la espalda con las manos ahuecadas, cubriendo todas las partes de ambos pulmones. Este método ayuda a descomponer las secreciones espesas en los pulmones, facilitando su eliminación.
Es importante contar con la asistencia de otra persona y recibir instrucciones claras del profesional de la salud antes de realizar este método en casa. Si tienes problemas de corazón o lesiones en las costillas, esta técnica puede no ser adecuada para ti.
Vibración
La vibración es similar a la percusión, pero en lugar de usar las manos ahuecadas, se utilizan las palmas planas. La persona que realiza el procedimiento coloca una mano sobre el pecho o la espalda del paciente y la otra mano sobre la primera, moviéndola rápidamente de un lado a otro para crear una vibración.
Este método es efectivo para aflojar las secreciones acumuladas en los pulmones y facilitar su expulsión.
Drenaje postural
El drenaje postural utiliza la gravedad para ayudar a despejar las vías respiratorias. Este método es especialmente útil por las mañanas para eliminar las secreciones acumuladas durante la noche. El drenaje postural puede combinarse con otros métodos de higiene pulmonar, como los ejercicios de respiración o la vibración.
Dependiendo del área de los pulmones que necesite limpieza, se adoptarán diferentes posturas. Por ejemplo, para despejar las secreciones de la parte inferior de los pulmones, es recomendable acostarse boca arriba con almohadas debajo de las caderas.
Cómo practicar la higiene pulmonar de manera segura
Si bien los métodos de higiene pulmonar son generalmente seguros, pueden resultar un poco incómodos en ocasiones. Es fundamental que un profesional de la salud te enseñe cómo realizar estos procedimientos correctamente antes de intentarlos en casa. Además, es recomendable que un amigo o familiar te acompañe para aprender cómo asistirte si es necesario.
Recuerde que la higiene pulmonar es solo una parte de su plan de tratamiento. No olvides seguir todas las indicaciones y tratamientos prescritos por tu médico.
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Conclusión
La higiene pulmonar ofrece una amplia variedad de beneficios para quienes padecen problemas respiratorios. Es posible que debas probar diferentes métodos para encontrar el que mejor funcione para ti. Si tienes alguna duda sobre alguna técnica, consulta con tu médico para obtener más información y asegurarte de que estás practicando la técnica más adecuada para tu situación.