Hombres, los más afectados por el cáncer de vejiga
En México este cáncer es más prevalente en hombres mayores de 50 años, con poco más del 70 por ciento.
El cáncer de vejiga ocupa el noveno lugar mundial en cuanto a número de diagnósticos oncológicos.
Esta patología silenciosa afecta a miles de mexicanos cada año. Según Globocan, en México este cáncer es más prevalente en hombres mayores de 50 años, con poco más del 70 por ciento.
El tipo de cáncer más común es el carcinoma urotelial, representa aproximadamente el 90 por ciento de todos los cánceres de vejiga.
En el 2020 en México se registraron 3 mil 422 nuevos casos de cáncer de vejiga, y mil 339 muertes por esta causa.
Durante el mismo año, a nivel mundial se reportaron más de medio millón de nuevos casos y más de 200 mil muertes.
El tipo de cáncer de vejiga con mayor número de incidencia es el carcinoma urotelial, representa aproximadamente el 90 por ciento de todos los cánceres de vejiga.
Este cáncer se origina en las células uroteliales que se encuentran en las vías urinarias.
La mayoría de los cánceres de vejiga comienza en el revestimiento más interno de la vejiga.
Con el tiempo, el cáncer puede crecer fuera de la vejiga y llegar a estructuras cercanas, extendiéndose a ganglios linfáticos próximos o a otras partes del cuerpo, lo que permite dividir en dos tipos al cáncer, en función de qué tan lejos se ha diseminado hacia la pared de la vejiga.
Cánceres no invasivos: se encuentran solo en la capa interna de células, no han crecido hacia las capas más profunda.
Cánceres invasivos han crecido hacia capas más profundas de la pared de la vejiga. Estos cánceres tienen más probabilidades de diseminarse y son más difíciles de tratar.
No hay una causa exacta por la cual se presenten la mayoría de los cánceres de vejiga, sin embargo, existen múltiples factores de riesgo que pueden incrementar la posibilidad de desarrollarlo:
Uno de los principales signos que puede presentar este tipo de cáncer es la sangre en la orina (llamada hematuria), acompañada de otros síntomas urinarios como:
Al tener síntomas poco específicos, esta patología suele confundirse con enfermedades de transmisión sexual o infecciones en las vías urinarias, lo cual puede retrasar su diagnóstico.
Ante este panorama, la campaña “Sumamos+Vida” de Merck busca resaltar la importancia de realizar revisiones periódicas para detectar y diagnosticar de manera oportuna cualquier tipo de cáncer de vejiga y recibir un tratamiento adecuado en caso de ser necesario.
Las opciones de tratamiento para el cáncer de vejiga dependen de varios factores, incluido el tipo grado y etapa del cáncer.
El tratamiento del cáncer de vejiga puede incluir: cirugía, terapia intravesical, quimioterapia, radioterapia, inmunoterapia y medicamentos de terapia dirigida.
Dentro de los tratamientos actuales para pacientes con carcinoma urotelial metastásico se encuentra la quimioterapia; sin embargo, se ha visto que es importante realizar un testeo genético en estos pacientes.
Dicho testeo tiene el objetivo de conocer si cuentan o no con alguna alteración genética, como podría ser el caso de mutaciones en el FGFR, lo cual, gracias a las innovaciones y la investigación científica, las personas que no contaban con alternativas terapéuticas para tratar esta enfermedad en su fase avanzada podrán acceder a tratamientos personalizados más prometedores que, además, son administrados de forma oral, explica la Dra. María Teresa Bourlon de los Ríos, responsable de la clínica de tumores genitourinarios del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán.
“La medicina de precisión fortalece las estrategias terapéuticas para seguir transformando la forma de tratar esta enfermedad de manera integral. Este enfoque abre un horizonte de posibilidades para mejorar la vida de las personas”, dice Santiago Posada, director médico de Janssen México.
Otro punto muy importante para quienes reciben un diagnóstico de cáncer es el cuidado de su salud mental, pues diversos estudios apuntan que hasta un 50 por ciento de los pacientes que padece cáncer presenta alguna alteración psicológica.
Aún no existe alguna manera de prevenir por completo el cáncer de vejiga, no obstante, existen medidas que pueden tomarse para reducción del riesgo como:
El cáncer de vejiga es un problema de salud pública en México, así que la detección temprana debe tomarse con seriedad, al igual que la generación de mayor conocimiento de los factores de riesgo y sintomatología, pues ello permitirá que más gente mejore su calidad de vida y disminuya riesgos.