¡Imperdonables! Los peores crímenes contra la moda
¿Jeans con pinzas? ¿Jeans o leggins? ¿Es bueno usar hombreras? ¿Usar tenis con tacones o los famosos crocs son buenas opciones? Aquí te lo decimos.
La mezclilla es una de las mejores telas en el mundo, pero hasta lo más hermoso puede ser arruinado con una decisión equivocada… por ejemplo, cuando alguien decidió que los jeans necesitaban tener pinzas.
Nunca se ven bien, no le quedan a nadie, y nos sigue sorprendiendo el que no hayan desaparecido del todo.
Se pusieron de moda durante los ochentas pero, ¿cómo pudieron convertirse en moda? No eran cómodas, no lucían bien y era muy fácil que hicieran que los pies olieran mal.
Quizá su popularidad se deba a sus colores, fáciles de adaptar a cada moda, y a que no cuestan tanto como unos zapatos de otro material.
Recientemente muchas mujeres de todas las edades parecían hijas de un ser humano y una bola disco: se valía aplicar pedrería en todo, pero especialmente en las playeras.
Sentían que estaban a la moda pero, cuando la pedrería se aplicaba solamente en el logo, acababan convirtiéndose en publicidad andante.
Seamos honestos: los crocs son una gran elección para niños pequeños, enfermeras y cualquier persona que tenga que pasar mucho tiempo de pie.
¿Pero por qué los usamos para ir al banco, a un concierto y a hablar con la maestra de nuestros hijos? Es una tendencia con la que seguimos viviendo, pues millones de personas los compraron y continúan usándolos (pero, por lo que más quieras, deja de llevarlos al trabajo).
Esta sí es una tendencia criminal. Los tenis se inventaron para que todos nos movamos con más comodidad, facilidad y rapidez… pero agregar un tacón a un zapato atlético es la peor interpretación de “rebeldía” que hemos visto.
¿No sufrimos demasiado con el resto de nuestros zapatos? Por suerte, a excepción de ciertas marcas, parece que los tenis siguen completamente pegados al piso.
En general, no nos convencer los rompers para adultos: algunos se ven lindos, pero debe ser un fastidio tener que desnudarse para ir al baño.
Este simple hecho los convierte en una elección terrible porque la ropa jamás debería entrar en contacto con el piso de un baño público. Tampoco podemos comprender por qué un hombre querría ponerse uno.
Al diferencia de los zapatos de plástico, estos “accesorios” no se pusieron de moda cuando la economía mundial estaba en sus niveles más bajos; se entendería si hubieran surgido durante una crisis.
Pero aparecieron en un momento de bonanza económica y se convirtieron en una opción válida frente a las bandas tradicionales. Honestamente, no podemos encontrar una buena razón por la cual la lencería debería transformarse en un accesorio para el cabello.
¿Por qué nos hicimos esto durante los ochentas y los noventas? A menos de que practiquemos futbol americano, no podemos imaginar por qué necesitamos su presencia en nuestras vidas.
De acuerdo con las revistas de entonces, las hombreras enormes nos harían ver más delgadas, pero fue una gran falsedad: lo único que lograban era que pareciera que nos habían clavado una tabla en la espalda. (¿Lo peor? Parece que pronto estarán de regreso).
Todos amamos unas botas cómodas y calientitas. El que haya bastante calor como para ponernos unos shorts es una bendición. Pero combinar ambos es como tener dos personalidades.
No existe un clima que permita usar al mismo tiempo frescos shorts y botas forradas con peluche (a menos de que por alguna razón la parte superior de tu cuerpo se encuentre bajo los rayos del sol mientras tus pies están dentro de una hielera).
De nuevo, hay que elegir uno solo: jeans o leggins, no ambos. Si te gusta que tus jeans sean de mezclilla stretch, perfecto: suelen verse muy bien.
Pero la idea de que la mezclilla requiera más de un 2 por ciento de Spandex o Lycra simplemente significa que estás usando la talla equivocada. Sé honesta, adquiere una talla mayor y recuerda lo increíble que es poder respirar con libertad.
No hablamos de todos los kakhis: son cómodos y muy prácticos cuando hace calor y no soportamos usar mezclilla. Pero hace algunos años estuvieron de moda los khakis exageradamente anchos.
Además, por su inmenso tamaño las orillas acababan rotas, maltratadas y sucias. Se decía que se inspiraban en la moda de los skaters, pero se nota que nunca le preguntaron a uno de ellos lo que realmente opinaba.
Tomado de rd.com 11 Fashion Trends That Never Should Have Happened