Infidelidad: por qué pasa, señales y… ¿tiene un lado positivo?

¿Sabías que más del 90% de personas estarían dispuestas a cometer una infidelidad bajo la garantía de que nunca fuesen descubiertas? Aquí te cuento por qué suceden usualmente las infidelidades, algunas señales y si hay un lado positivo de vivir una infidelidad.

De entrada, no hay una definición exclusiva para la infidelidad, ya que cada pareja funciona de formas distintas y la infidelidad puede interpretarse de formas diversas.

Para acercarnos a una noción, podemos decir que la infidelidad es una defraudación, traición y violación de aquellos acuerdos previos que se establecieron en pareja.

¿Por qué se dan las infidelidades? 

La infidelidad usualmente no tiene una sola causa; se da por diversos factores que coinciden y generan un efecto.

La psicóloga Mariana Elena Badillo menciona las razones más frecuentes por las que se da una infidelidad.

• Insatisfacción: uno de los miembros de la pareja siente que sus necesidades no están siendo atendidas o cubiertas dentro de la relación, ya sean sexuales o afectivas.
• Inseguridad y/o baja autoestima: hay personas que sólo a través del proceso de la conquista logran sentirse valiosas, admiradas y atractivas. Este proceso de conquista les sirve para reafirmar algunos de sus vacíos emocionales en su autoconcepto o autoconfianza.
• Personas que no son monógamas: la monogamia es un comportamiento social que se impone explícita e implícitamente en nuestro desarrollo, pero hay personas que no encajan en este constructo social por lo que no son capaces de estar con una sola persona.

10 señales de que tu pareja podría estar siéndote infiel

1. Cambio con el teléfono: el uso del celular comienza a incrementar, lo lleva para todos lados, notas nerviosismo cuando tú lo tomas, no responde llamadas ni mensajes cuando está contigo.
2. Muchos celos: los celos pueden reflejar una inseguridad de nosotros mismos. Algunos mecanismos proyectivos señalan que ciertos deseos propios, aspiraciones o incluso acciones que estamos realizando, podemos reflejarlos o proyectarlos en la pareja.
3. Irritabilidad o cambios de conducta: de la noche a la mañana y de forma injustificada tu pareja comienza a estar irritable y con molestia la mayor parte del tiempo.
4. Cambio espontáneo de gustos: sus nuevos intereses serán notables porque aparecerán de la noche a la mañana y tendrá mucha motivación en ellos. No te incluirá en esos nuevos intereses.
5. Excesivo cambio de apariencia: la persona volverá a tener notorio empeño y motivación en lucir bien e incluso en mantener su auto aseado.
6. Cambio en el trato hacia ti: en el caso de las mujeres, suelen presentar malhumor, marcan distancia, ya no se ríen de tus bromas, son poco tolerantes y pacientes. En el caso de los hombres, comienzan a ser más detallistas materialmente, pero también más distantes.
7. Variación en ritmo y frecuencia en relaciones sexuales: la mayoría de las personas evaden el encuentro íntimo.
8. Ya no comparte tanto tiempo contigo: buscará actividades que pueda hacer sin tu compañía y evitará que te involucres si muestras interés.
9. Tiene antecedentes de haber sido infiel: cuando una persona ha sido infiel en su pasado, no es raro que pueda volverse un comportamiento o mecanismo repetitivo.
10. Sensación de engaño: simplemente no ignores tu intuición.

 

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¿Hay algo positivo en la infidelidad?

La crisis que impacta la relación de pareja tras una infidelidad no precisamente debe de ser el fin. Con la suficiente madurez emocional el resultado de la crisis podría desembocar en una nueva etapa para que la relación de pareja se transforme.

Una infidelidad obliga a la pareja a comunicarse, a hablar de sus necesidades y de su relación, eso hace que la relación de pareja se abra y se refuerce.

La pareja se ve orillada a dialogar sobre sus intereses e incluso de sus pasiones sexuales, quizá logrando superar los prejuicios iniciales de una relación.

Sólo no olvides…

Que si tu pareja elige ser infiel esa es su decisión. Una infidelidad no es un error, es una decisión.

María E. Badillo puntualiza que, tras una infidelidad, si la pareja decide esforzarse para volver a sacar a flote su relación, necesitarán amor genuino y que las dos partes de la pareja estén dispuestas a realizar trabajo con conciencia y con intensidad.

Las situaciones de pareja no se solucionan solo hablando; la comunicación es solo un paso para entender qué está pasando y así llegar a acuerdos, los conflictos de pareja se solucionan actuando. Los actos requieren compromiso, convicción y constancia.