Influenza canina, un nuevo virus potencialmente peligroso para los humanos
Los perros podrían ser portadores de un nuevo virus de la influenza, resultado de la combinación de dos cepas de la influenza.
La Universidad de Corea ha desarrollado durante 10 años estudios en torno a la influenza canina, una mutación del virus de la influenza A, que sería mortal para los humanos.
Esta investigación apunta a que los perros podrían ser portadores de un nuevo virus de la influenza, resultado de la combinación de dos cepas de la influenza y los animales de compañía podrían ser una fuente de contagio.
Esto resulta potencialmente peligroso para los humanos, al no contar con la inmunización necesaria para atacar las mutaciones de los virus.
El estudio dice que durante la década de los 2000 se registraron distintos casos de virus que cruzaron la barrera del huésped, o sea, se transmitía a una especia distinta a la del portador, como pasó con la gripe aviar (H3N2) que llegó a los perros y se convirtió en el virus de la influenza canina (CIV, por sus siglas en inglés).
La investigación, publicada en el sitio Phys.org menciona que el CIV H3N2 podría combinarse con el virus H1N1/2009 y formar un nuevo virus de la influenza llamado CIVmv.
Si el virus logra transmitirse y propagarse a los humanos a partir de sus mascotas, podría tener el potencial de propagarse por toda la población extremadamente rápido.
Dentro de la investigación, los perros infectados con la CIVmv infectaron a un grupo de hurones, quienes tienen mecanismos de protección antivirus semejantes a los de los humanos. Por eso se concluye que el virus mutado de la influenza podría transmitirse a los humanos.
Otra cosa importante que menciona esta investigación de 10 años es que el virus de la influenza CIV no solo ataca a los perros, también puede ser transmitido a los gatos.
El desarrollo del virus en gatos es un foco de alarma para los investigadores, ya que muestra que la mutación de este virus puede extenderse entre diferentes especies de animales, lo que abre la posibilidad de que se vuelva endémico en los animales de compañía.