La leyenda de Tarzan
No cuenta con la mejor caracterización del hombre mono, pero sí con una buena dosis de acción y aventura para mantenerte atento. La leyenda de Tarzán se suma a la lista de las más...
No cuenta con la mejor caracterización del hombre mono, pero sí con una buena dosis de acción y aventura para mantenerte atento.
La leyenda de Tarzán se suma a la lista de las más de 40 adaptaciones al cine del personaje creado por Edgar Rice Burroughs en 1912. Esta vez de la mano de David Yates, el director de las últimas cuatro películas de Harry Potter (y quien tomó este único respiro del mundo mágico antes de volver con Animales fantásticos y dónde encontrarlos).
Han pasado muchos años desde que Tarzán abandonó la selva de África junto con su esposa Jane y ahora lleva una vida de lujos y comodidades en Londres, bajo el nombre de John Clayton III, Lord Greystoke. Al inicio de la cinta el Parlamento británico lo invita a regresar al Congo para servir como emisario de comercio y, estando allá, descubre que el Capitán Rom lo está utilizando como peón para colonizar la región.
Así que más que la “leyenda” de Tarzán, lo cual nos hace pensar que se trata de la historia de origen del hombre mono, esta película se podría describir mejor como “Tarzán 2”, “El retorno de Tarzán”, “Tarzán regresa” o “incluso Tarzán contraataca”. Hay varios flashbacks que remiten a su pasado, sus padres, su llegada a la isla, su relación con los monos y su encuentro con Jane, pero en esencia la película es más una secuela del relato que todos conocemos, de hecho, desde un principio el director asume que estamos familiarizados con los personajes.
El actor sueco Alexander Skarsgård le da vida a Tarzán sin dejar una huella positiva o negativa en la caracterización del personaje, más allá del tiempo que invirtió para lograr esos cuadritos abdominales –que seguramente serán un atractivo suficiente para muchos espectadores-. Y me refiero a que no interpreta al hombre mono más icónico del cine, pero tampoco estropea su imagen. Sus dos coprotagonistas son quienes llevan una dinámica más memorable. Margot Robbie, quien interpreta a una hermosa Jane, valiente y con clase que no cae en ser la damisela en peligro y Christoph Waltz como el villano, Leon Rom –al estilo que ya habíamos visto antes en Bastardos sin gloria o SPECTRE-.
La fotografía a cargo de Henry Braham (Nanny McPhee, Guardianes de la Galaxia 2) invita a maravillarnos con los paisajes, que lamentablemente no están llenos de colores vivos y llamativos, pues la cinta se mantiene con un velo oscuro entre tonos verdes y grises. Y el uso del CGI y escenas en slow motion, lo primero tan evidente y lo segundo un poco excesivo, que te saca de golpe de ese mundo salvaje. Fuera de eso, la película cumple con sus dosis de aventura, acción y batallas para mantenerte entretenido.