El impacto de un nuevo bebé en la familia puede ser grande, por eso es importante preparar a tu hijo mayor, presentar al nuevo bebé y fomentar un vínculo saludable entre hermanos.
Llevar a casa al recién nacido es un poco diferente la segunda vez. Con el primer hijo, te concentraste en descubrir cómo cuidar del bebé. Con el segundo, probablemente te preguntes cómo reaccionará tu hijo mayor ante el nuevo hermano y cómo podrás satisfacer las necesidades de ambos. Aquí te brindamos información para este nuevo cambio en tu vida.
Comienza por hablar con tu hijo mayor acerca de la llegada del nuevo bebé. Con palabras adecuadas para su edad, explícale cómo crece el bebé y pídele ayuda para prepararle la habitación.
Explícale a tu hijo mayor que el bebé comerá, dormirá, llorará la mayor parte del tiempo y, al principio, no podrá ser su compañero de juegos. Procura que tu hijo mayor aprenda a ir al baño antes de que nazca el bebé o, de lo contrario, deja que pasen unos meses desde la llegada a casa del nuevo bebé para comenzar con el proceso.
Haz los arreglos necesarios para que alguien cuide a tu hijo mayor mientras estés en el hospital o en el centro de maternidad y hazle saber al niño que solo te irás por poco tiempo y luego regresarás.
Cuando nazca el bebé, pídele a algún familiar o amigo que lleve a tu hijo mayor al hospital para una visita corta. Deja que alguna otra persona de la familia sostenga al bebé durante un rato para que ambos padres puedan abrazar mucho al hijo mayor.
Considera darle a tu hijo mayor un regalo de parte del bebé, como una camiseta donde claramente se lea “hermano mayor”. Cuando vuelvas a casa, lleva a tu hijo mayor a un lugar especial, como su parque infantil preferido, para festejar la llegada del nuevo hermano.
La edad y el desarrollo de tu hijo mayor repercutirán sobre su reacción ante el nuevo hermano. Los niños de más edad generalmente están deseosos de tener un nuevo hermano, pero los menores podrían sentirse confundidos o molestos. Toma en cuenta estos consejos para ayudar a tu hijo a adaptarse a la nueva situación.
Tu hijo mayor podría empezar a romper las reglas para intentar llamar la atención, aunque eso signifique recibir un castigo. Para ponerle fin a este comportamiento, felicita a tu hijo mayor cuando se porte bien. Si sospechas que tu hijo se porta mal para llamar la atención, considera ignorar su comportamiento, pues eso podría incentivarle a buscar una manera más positiva de llamar tu atención. Habla con tu hijo mayor y pregúntale cómo se siente ahora con el nuevo hermano… escucha lo que dice.
Ten en cuenta que después de la llegada de un nuevo bebé, a veces, los niños muestran regresión o actúan como si fuesen más chicos; por ejemplo, tienen accidentes con los esfínteres o quieren volver al biberón. Prodígale amor y seguridad cuando muestre alguna conducta regresiva.
En ocasiones, los hijos mayores se estresan por los cambios que suceden a su alrededor y descargan su frustración en el nuevo bebé. Si tu hijo mayor intenta hacerle daño al bebé, es el momento de hablar acerca de qué es un comportamiento adecuado y qué no.
Presta también más atención a tu hijo mayor e inclúyelo en las actividades que haces con el bebé, como al cantarle, bañarle o cambiarle los pañales. Felicita a tu hijo mayor cuando trate con cariño al nuevo bebé.
Es fundamental supervisar a los niños, incluso cuando parece que se llevan bien. Nunca dejes al recién nacido solo con un hermano ni nadie menor de 12 años.
Si piensas amamantar a tu bebé recién nacido, quizás te preguntes cómo reaccionará tu hijo mayor o cómo mantenerlo ocupado mientras lo haces. La primera vez que te vea amamantando al bebé, tu hijo mayor posiblemente empiece a rondarte. Explícale lo que estás haciendo y responde sus preguntas. Si también le amamantaste, explícale que lo hiciste igual con él o ella.
Piensa en crear una rutina de amamantamiento que incluya a tu hijo mayor, a quien puedes asignar un papel especial, como ayudarte con el cambio de pañal antes de alimentarlo o traerte una almohada. Para mantener a tu hijo entretenido mientras amamantas al bebé, ten a mano por adelantado ciertos juguetes especiales o un libro de actividades.
Pon música o toca la versión audible de un libro de cuentos. Invita a tu hijo mayor a acurrucarse contigo mientras amamantas al bebé.
¿Cómo explico a mi hijo mayor un posible problema de salud?
Si tu bebé recién nacido tiene problemas de salud, explícale al niño mayor que su hermanito está enfermo y que estás preocupada por eso. Si el bebé necesita permanecer internado en el hospital después del nacimiento, pregunta cuál es política para las visitas de los hermanos. Puedes también tomar fotos al bebé y mostrárselas al hermano mayor.
Recuerda que aunque no le hables a tu hijo mayor sobre el estado del bebé, de todas maneras, el niño posiblemente perciba que algo anda mal. En lugar de ocultarle la situación, dale algo de información sobre lo que ocurre y demuéstrale que estás allí si te necesita.
Si nace más de un bebé, el tiempo que esos niños demandan es aún mayor para los padres. Los bebés múltiples también atraen la atención de la familia, los amigos y aún de extraños. Un hermano mayor podría sentir celos o que lo han dejado de lado. Tu hijo mayor necesitará tiempo especial solo contigo.
Si tienes un hijo mayor y decides adoptar un bebé, tendrás que responder distintas preguntas sobre los bebés y las familias. Hay libros sobre la adopción adecuados para la edad del niño mayor que pueden ayudarte a hablar sobre cómo funciona el proceso y qué significará para tu hijo convertirse en hermano mayor.
El hecho de que es impredecible el momento en que te asignarán la adopción puede dificultar la situación para tus otros hijos. En ocasiones, la espera de la adopción es bastante larga, a diferencia de otras en las que la asignación sucede rápidamente.
Si el hijo adoptado no es un bebé, la transición hacia la relación fraterna sucede a otro ritmo. Tus otros hijos tendrán dificultad para compartir, no solo a ti, sino también sus juguetes y su espacio.
No hay duda que la llegada de un nuevo hermano cambiará tu familia. A medida que tu hijo mayor va adaptándose, recálcale cuánto lo amas. Explícale que ahora tiene otra función importante que debe cumplir y es la de hermano mayor.
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