La Isla Calavera recupera al rey de los gorilas para crear una nueva franquicia.
Desde su origen, el cine ha creado sus propias leyendas: héroes, villanos y monstruos. Uno de los más memorables es Kong, el gorila gigante que vive en la Isla Calavera y que, contra su voluntad, encuentra su trágico final en un rascacielos de Nueva York.
¿Qué tiene su historia que no deja de fascinarnos? ¿Y por qué, si es un monstruo destructor, su destino nos inspira tanta compasión?
Aunque “Kong: La Isla Calavera” ocurre hacia el final de la Guerra de Vietnam, la película empieza de forma parecida a las anteriores. Un grupo de exploradores llega a la Isla Calavera, es perseguido por monstruos y se encuentra con el gorila gigante. Sin embargo, en esta ocasión la trama ocurre exclusivamente en la isla, y el mayor enemigo de Kong no es la civilización, sino los monstruosos reptiles que acabaron con sus ancestros y lo convirtieron en el último de su especie. Incluso, algunos de los humanos lo reconocen como un aliado y se niegan a hacerle daño.
Si bien la primera “King Kong” fue creada como una historia de terror por un cineasta obsesionado con los gorilas, acabó siendo un reflejo de cómo los humanos destruimos todo aquello que no comprendemos. Pero en este nuevo cine de franquicias, y a pesar de algunas breves reflexiones sobre cómo la guerra puede cambiar a las personas, lo importante es el espectáculo: esta nueva versión es más una buena cinta de acción que una tragedia con un monstruo como protagonista. Después de todo, cierto kaiju llamado Godzilla necesita un rival para el año 2020, ¿y hay otro mejor que el rey de los gorilas?
En entregas anteriores…
“King Kong” (1933, Merian Cooper). La película original, con el final ubicado en el edificio Empire State. Desde su estreno se le han reinsertado escenas que en su momento fueron editadas o censuradas; solo una, el ataque de las arañas gigantes, jamás ha sido encontrada.
“King Kong” (1976, John Guillermin). Protagonizado por Jessica Lange y Jeff Bridges, el primer remake reubica la trama en la década de los setentas. A diferencia de la original, la protagonista sí aprecia al gorila e intenta defenderlo. El final ocurre en el entonces recién inaugurado World Trade Center.
“King Kong” (2005, Peter Jackson). El segundo remake combina la trama de 1933 con la relación entre la protagonista y el gorila de la cinta de 1976. Protagonizado por Naomi Watts, Jack Black y Adrien Brody, tuvo al primer Kong realizado mediante motion capture.
Curiosidades
- Kong fue creado por el cineasta Merian Cooper, a quien le habían interesado los gorilas desde que era pequeño. Aunque propuso filmar “una película de terror con gorilas”, lo único que siempre tuvo claro era el final: Kong cayendo del edificio Empire State.
- En Japón, Kong es catalogado como uno de los kaiju (monstruos gigantes) más fuertes e inteligentes. El estudio Toho Co produjo dos películas con este personaje durante la década de los sesenta.
- “Kong: Isla Calavera” es la segunda entrega del llamado MonsterVerse, en el que las productoras Legendary Entertainment y Toho Co enfrentarán a sus respectivos kaiju. La primera entrega fue el remake de “Godzilla” de 2014. Por lo anterior, el nuevo Kong combina elementos del diseño de 1933 con detalles del diseño japonés de los sesenta.
- Kong ha tenido dos atracciones en el parque temático Universal en Orlando. La primera versión, “Kongfrontation”, colocaba a los turistas en medio del ataque de Kong a Nueva York. La segunda, “Skull Island: Reign of Kong”, los lleva a la Isla Calavera.
“Kong: Isla Calavera” (2016). Dirigida por Jordan Vogt-Roberts. Con Tom 8Hiddleston, Samuel L. Jackson, John C. Reilly y Brie Larson.
Otros estrenos de la semana:
Neruda (2016). Dirigida por Pablo Larraín, narra cómo el poeta y senador Pablo Neruda (interpretado por Luis Gnecco) intenta escapar de Chile después de criticar abiertamente al entonces presidente Gabriel González Videla. Protagoniza Gael García Bernal.
En este rincón del mundo (2016). ¡No subestimes esta película por ser animada! En 1944, Suzu se muda a Kure, cerca de Hiroshima. A través de sus ojos, vemos los retos que enfrentaron los civiles japoneses hacia el final de la Segunda Guerra Mundial.
