La risa, remedio infalible: Un gorila entra a un bar…

Un gorila entra a un bar y ordena un martini. Asombrado, el cantinero piensa: “Caray, supongo que debo preparar el trago”.

Tras recibirlo, el primate saca un billete de 20 dólares.

El empleado recibe el dinero y decide poner a prueba la inteligencia de su inusual cliente, entregándole 1 dólar de cambio.

Completamente en silencio, el animal le da un sorbo a su bebida.

—¿Sabe? —comenta el cantinero— No vienen muchos gorilas por aquí.

—Bueno, pues con los tragos a ese precio, ¡no me sorprende en lo absoluto! —responde el primate.

Sunnyskyz.com

En la escuela, un chico le dice a una chica:

—Yo creo que te amo, porque cuando te veo se me corta la respiración.

—Eso no es amor, es asma —responde ella.

—Ah, bueno, entonces te asmo.

Enviado por Gustavo Mejía, Colombia

Si hay una cosa que he aprendido de los anuncios de colchones en la televisión es que NO es bueno tener una columna vertebral color rojo vivo. Nuestro cuerpo prefiere tener una columna color azul rey.

@monicaheisey

La pastelería recibe una solicitud telefónica.

—¿Qué desea que diga su tarta? —pregunta el empleado.

El cliente cubre la bocina con la mano y le dice a su esposa:

—¿Queremos una tarta parlante, cariño?

@keepotato

Idea que podría valer millones de dólares: crear una app que envíe un mensaje de texto cuando la luz del semáforo cambie a verde.

@damienfahey

Un canguro escapa constantemente de su recinto en el zoológico, de modo que los cuidadores deciden instalar una cerca de 3 metros de altura. Sin embargo, al día siguiente el animal vuelve a escapar. Esta vez, los encargados ponen una cerca
de 6 metros, pero el resultado es el mismo. Cuando la valla alcanza los 12 metros de altura, un camello que habita en el espacio contiguo le pregunta a su vecino:

—¿Hasta dónde crees que lleguen?

—Quizá a los 300 metros, a menos que alguien se dé cuenta primero y asegure la puerta por la noche —contesta el canguro.

gcfl.net

Tras extraviar a su querido perro, un sujeto paga por poner un anuncio en el periódico que dice: “Ven aquí, muchacho”.

Spike Milligan, comediante