Las supersticiones que dan vida al Día de Muertos
El Día de Muertos está cargado de misticismo y supersticiones que buscan honrar a los muertos y proteger a los vivos de malas energías.
El Día de Muertos, especialmente en México y otras regiones de América Latina, está lleno de supersticiones y creencias que se entrelazan con el respeto a los muertos y la conexión con el más allá.
A diferencia de Halloween, que tiene un tono más de miedo o diversión, el Día de Muertos es una festividad de honor y de recordar a los seres queridos que ya no están.
Sin embargo, también existen supersticiones asociadas a este día, y en Selecciones te contamos sobre ellas.
Se cree que durante las noches del 1 y 2 de noviembre, los espíritus de los muertos regresan a este mundo para visitar a sus familias.
Las ofrendas y altares son una forma de invitar a los muertos a volver a casa. Si no se prepara un altar o si no se ponen los elementos adecuados (pan de muerto, flores, velas, fotos, etc.), los espíritus pueden sentirse rechazados o molestos, y la familia podría enfrentar mala suerte o enfermedades.
En algunas regiones se cree que si una persona derrama sal durante el Día de Muertos, los espíritus de los muertos que visitan podrían enfurecerse o sentirse ofendidos.
Para evitar esto, algunas personas tienen la costumbre de recoger la sal que se ha derramado y tirarla detrás de su espalda.
Las velas que se colocan en los altares no solo son para iluminar el camino de los espíritus, sino también para proteger a las personas de las malas energías. Si una vela se apaga por sí sola durante la noche, se cree que es una señal de que un espíritu está cerca.
Algunas personas aseguran que las velas que se apagan sin razón deben ser cambiadas, ya que podrían estar “atraídas” por una energía negativa.
Existe la creencia de que los perros tienen la capacidad de ver a los espíritus. Si un perro aúlla o se comporta de manera extraña en la noche de muertos, se dice que está “viendo” a un espíritu.
En algunas zonas, es común que se proteja a los perros de las almas errantes, pues se piensa que podrían intentar llevarse al animal al inframundo.
Las calaveritas de azúcar, tan tradicionales en el Día de Muertos, también están envueltas en supersticiones.
Se cree que, si no se colocan correctamente o si se rompe una calavera sin querer, la persona a la que se le dedicó esa calavera podría sufrir algún tipo de mal augurio o enfermedad.
Se dice que el Día de Muertos es un día para celebrar a los muertos y no para sentirse tristes. Si las personas se sienten demasiado tristes o se quejan de manera excesiva durante estas fechas, se cree que podrían invitar energías negativas o que los muertos no disfrutarán de su visita.
La idea es mantener un ambiente de alegría y respeto, como si los muertos estuvieran regresando a casa.
Se coloca agua en los altares para calmar la sed de los espíritus que vienen del otro mundo. Sin embargo, si el agua se derrama o se pone de manera incorrecta, se cree que los espíritus podrían sentirse olvidados o perder el camino para llegar al altar.
Es importante que el agua esté limpia y colocada en el lugar adecuado.
En algunas regiones de México, las mariposas monarca son vistas como las almas de los muertos que regresan a casa.
Se cree que las mariposas monarca, que migran a México durante el otoño, son las almas de los ancestros y que su llegada a los bosques de Michoacán es una señal de que los muertos han regresado. Durante el Día de Muertos, es común ver decoraciones de mariposas monarca en los altares.
En algunas creencias, se piensa que los espíritus de aquellos que no tienen familiares vivos para honrarlos o hacerles ofrendas no regresan al mundo de los vivos.
En algunos casos, se cree que si no se realiza una ofrenda correctamente o si no se recuerda adecuadamente a los muertos, esos espíritus podrían quedar atrapados en el limbo o vagar sin descanso.
Se dice que en los días cercanos al Día de Muertos, algunas almas de personas que no han sido honradas o que han muerto de manera violenta o prematura pueden estar errantes y causar problemas.
Para evitar que estas almas errantes se acerquen, algunas familias dejan fuera de la casa comida y agua en lugares apartados, como una forma de alejar las energías negativas.
El Día de Muertos es una celebración profundamente espiritual y cultural, por lo que estas supersticiones, aunque en su mayoría son parte del folclore, tienen un gran significado para aquellos que las practican.