Los 9 masajes que debes tener
¿No puedes quitarte el nudo del cuello? Consiéntete con estos tips de masaje y deja que la tensión se vaya. Golpea suavemente los nudos Usando tus puños, golpetea suavemente el exterior de tu cuerpo,...
¿No puedes quitarte el nudo del cuello? Consiéntete con estos tips de masaje y deja que la tensión se vaya.
Golpea suavemente los nudos
Usando tus puños, golpetea suavemente el exterior de tu cuerpo, empezando por las piernas y los brazos, yendo de abajo hacia arriba. Cuando se realiza en la mañana, esta técnica de masaje despertará y preparará tu cuerpo y mente para el día que te queda por delante. Cuando se realiza antes de dormir, relaja la mente y se deshace del estrés y la tensión acumulada durante el día.
Nota: Si estas tomando alguna clase de diluyente de sangre, evita este consejo de masaje; ya que podrías acabar con moretones.
Frota tu vientre
Aunque la mayoría de las personas hacen esto instintivamente después de comer demasiado, tú debes hacerlo después de cada comida. Coloca una o las dos palmas en tu vientre y frótalo en el sentido de las agujas del reloj. Esta es la misma dirección en la que la comida se mueve por el intestino, así que este masaje ayudará a estimular la digestión.
Masaje, ejercicio, masaje
Masajear tu cuerpo, antes del estiramiento, entrenamiento de cardio o de fuerza, incrementa la circulación de la sangre a los músculos. Masajear los músculos después de ejercitarte puede ayudarte a optimizar la remoción de desechos y acelerar la recuperación de músculo.
Antes del ejercicio, da pequeños golpes para llevar la sangre a los músculos de tus piernas y brazos. Después del ejercicio, frota a lo largo de tus músculos con tu palma o puño, moviéndote en dirección al corazón.
Cada vez que te hidrates, tómate el tiempo para consentir tus manos con un bien merecido masaje.
Desestresa tu cuello
Cada hora, toma un receso para desestresar tu cuello.
Libera la presión nasal
Para aliviar la congestión nasal, frota con tus dedos índices.
Calienta tus ojos
Alivia los ojos cansados frotando tus manos hasta calentarlas y poniendo cada una en un ojo.
Relaja los pies cansados
Lava tus pies, siéntate cómodamente y masajéalos
Abrazo de oso
Relaja la tensión de los hombros dándote un abrazo de oso. Cruza los brazos sobre tu pecho y toma tus hombros. Aprieta y suelta cada hombro tres veces. Luego mueve tus manos hacia tus brazos, apretando y relajando hasta llegar a las muñecas.
Adaptado de: Mejore su Salud con 5 minutos al día, Ed. Reader’s Digest