¿Los juguetes sexuales pueden causar anorgasmia?
La respuesta es no. Los juguetes sexuales no provocan enfermedades, al contrario, alivian algunas como la disfunción eréctil, el trastorno de excitación genital y la disfunción orgásmica.
Ante el incremento en la compra de juguetes sexuales (durante la pandemia crecieron hasta 200%) infinidad de personas se cuestionan cuál es el papel de estos objetos en el mejoramiento de la vida sexual.
Pero también surgen dudas sobre si son amigos o enemigos de las mujeres, pues se dice que pueden ser causantes de anorgasmia.
La anorgasmia, según la Clínica Mayo, es el retraso, la poca frecuencia o la ausencia de orgasmos (o la presencia de orgasmos significativamente menos intensos) tras la excitación sexual y una estimulación sexual adecuada.
Las principales causas de anorgasmia suelen ser psicológicas, así que no se recomiendan mucho los juguetes sexuales en primer término, pero sí durante el tratamiento, dice Laia Cadens, psicología clínica y sanitaria, especializada en Sexología clínica y Terapia de Pareja por la European Society of Psichology.
Pero antes de entrar en materia sería importante hablar sobre la vida sexual de las mujeres.
Se estima que hasta 41 por ciento de las mujeres en todo el mundo no experimentan el orgasmo, y 50 por ciento de las que lo obtienen no están satisfechas con la frecuencia con la que tienen orgasmos, según datos de la revista Psychology Today.
En México, solo el 43 por ciento de las mexicanas ha experimentado el clímax, mientras que casi el 55 por ciento nunca se ha masturbado o acariciado los órganos sexuales hasta tener un orgasmo.
Puede haber anorgasmia a consecuencia de una enfermedad (esclerosis múltiple), por el uso de ciertos medicamentos, estrés, pero también se relaciona con una escasa educación sexual, creencias religiosas, tabúes y culpas y falta de comunicación entre la pareja, pues desemboca en una inadecuada estimulación sexual.
A las mujeres se les enseña a sentirse avergonzadas de su sexualidad incluso antes de comenzar a tener relaciones sexuales, lamentan expertos de Lelo, empresa de bienestar sexual.
A través de pensamientos constantes de que está mal tener impulso sexual, fantasías sexuales y disfrutar. Con ello están enseñando que son el género inferior.
“La sociedad hace que las mujeres se sientan avergonzadas y cohibidas de literalmente todos los aspectos de su sexualidad” agregan. Y esto debe cambiar.
Ante este panorama, el uso de juguetes sexuales es una buena opción para animarse a explorar el cuerpo por primera vez.
Los vibradores son increíbles para el autoconocimiento, es decir, para que la persona entienda cómo funciona su propio cuerpo, así como su placer sexual, dicen expertos de meibi, plataforma digital mexicana que promueve la educación y el bienestar sexual.
Sirven para que las mujeres reconozca cómo reaccionan la piel, los sentidos, la zona genital y cualquier parte del cuerpo ante distintos estímulos y, de esta forma, entiendan qué zonas son más sensibles, dónde le gusta más y cuáles son sus límites.
Los juguetes sexuales no provocan enfermedades, al contrario, alivian algunas como la disfunción eréctil, el trastorno de excitación genital y la disfunción orgásmica.
A ciertas personas, los juguetes sexuales les ayudan al manejo de efectos secundarios sexuales de ciertos medicamentos, algunos problemas de salud o de la menopausia, como baja libido o menos sensación en sus genitales (pene o vagina), se explica en Planned Parenthood, líder en servicios de salud sexual y reproductiva.
Además, son la manera más fácil de alcanzar el clímax.
Lo más importante para una vida sexual plena es la educación.
Es importante que las mujeres conozcan los nombres correctos de las partes de su cuerpo, sobre todo de sus genitales, pues a veces los desconocen.
También es fundamental que inicien con un proceso de autoerotismo.
“Que sepan que es una práctica saludable, natural y normal y no les causará algún problema” dice la Dra. Mari Mar Álvarez, fundadora de Nova House, espacio dedicado al tratamiento de problemas sexuales femeninos.
Infinidad de mujeres, dice esta experta, viven con mitos como “te está viendo Dios” o “te vas a volver adicta al sexo”.
“Hay que enseñarles a explorar su cuerpo es lo correcto y no existe una sola forma de experimentar los orgasmos” agrega.
Desde hace algunos años, el juguete erótico del momento ha sido el succionador de clítoris, destaca Laia Cadens, sexóloga del equipo de expertos de Gleeden, plataforma para citas extramatrimoniales.
Ese amado aparato no solo ofrece placer a millones de mujeres, sino que ha logrado que se hable con normalidad de la masturbación femenina tanto en redes sociales como en medios de comunicación.
Y pareciera que las mujeres se están haciendo “adictas” a él y sólo alcanzan el orgasmo de esta manera.
Pero la realidad es que no crea adicción y mucho menos lesiones.
En 2009 la revista especializada Journal of Sexual Medicine publicó un estudio que revelaba que el 71 por ciento de las mujeres que usaba vibrador jamás había sufrido efectos secundarios negativos.
Ninguna reportó irritación, desgarros o inflamación. Algunas han manifestado, a lo mucho, un leve entumecimiento de la zona estimulada tras una sesión prolongada, mismo que desapareció en breve.
Actualmente existe una variedad infinita de juguetes sexuales. Los más comunes son:
Vibradores (o masajeadores)
Vibran para estimular los genitales. Pueden usarse en clítoris y otras partes de vulva y vagina. También en pene, escroto y testículos, así como en pezones y ano.
La novedad en este rubro son los vibradores sin género, es decir, no simulan la forma de los genitales humanos; sus curvas estimulan los principales puntos sexuales de cualquier tipo de cuerpo, así que la manera de usarlos son infinitas y depende solo de la imaginación.
Dildos o consoladores
Estos objetos se introducen en vagina, ano o boca. Hay de diversas formas, pero por lo general se asemejan al pene.
Algunos son curvados para facilitar la estimulación del punto G o próstata. Los dildos están hechos de materiales como silicona, plástico, metal y vidrio resistente a los golpes.
Dispositivos anales
Su misión es estimular el ano, ya sea por dentro o por fuera. Existen los tapones anales, cuentas o bolas anales, masajeadores de próstata y dildos con base ancha.
Todo tipo de personas pueden decidir usar juguetes sexuales por diversas razones, pero también es válido no usarlos; es una decisión personal.
Los juguetes sexuales son aliados.
Una recomendación sería evitar que esos objetos sean la única forma de alcanzar el clímax.
Es importante, necesario y fundamental que las mujeres aprendan a tocarse y practiquen la masturbación con frecuencia. Esto ayudará a liberar estrés, relajarse y reconocerán su cuerpo.
“Vas a saber qué cosas te gustan, cómo te gustan y podrás comunicárselas a tu pareja”, concluyó la doctora Mari Mar Álvarez.