Los olores nos hace recordar, pero ¿por qué pasa esto?
En nuestro cerebro, hay algunas zonas que se activan cuando olemos un aroma. En este momento, el cerebro ‘captura’ ese instante y siempre que volvemos a inspirar ese olor, lo trae de vuelta a...
¿Te ha pasado que cuando vas caminando por la calle el olor de algo o el perfume de una persona que pasó a tu lado te hace recordar algo? Aunque no sabes a qué o a quién.
A mí me pasa que al percibir cierto perfume que ya tengo identificadísimo, inmediatamente me recuerda a un ex novio porque justo ese perfume era el que usaba o por lo menos el aroma se parece muchísimo.
Las fragancias, los olores, los aromas… tienen un poder especial sobre nuestra mente. Con tan solo oler algo, podemos recordar ciertos momentos y que nuestro pensamiento viaje a instantes de la niñez o de la juventud. Un viaje, un momento importante o incluso una persona…
Estos olores nos evocan recuerdos, por eso, son tan personales, y el olfato es uno de los sentidos que más agudizados tenemos. Podemos identificar a la perfección qué es algo tan solo por su olor, o también recordarlo.
Como cuando comemos algo delicioso y nos invade una sensación positiva y de placer por su sabor y olor. Provocando que nuestro cerebro registre y asocie ese placer con la comida y por eso algunas veces nos pasa que si olemos, por ejemplo, comida casera nos recuerda inmediatamente a los platillos que preparaba la abuela y sin duda eso nos ponemos felices.
Bueno, pues este tipo de recuerdos que llegan a la mente por algún olor en específico se debe a algo que se llama memoria olfativa.
¿Qué es la memoria olfativa?
La memoria funciona por asociación y por eso es que también cuando soñamos es porque asociamos algo que nuestro cerebro registró alguna vez y lo soñamos, aunque los sueños no sólo son por algo que vivimos o vimos alguna vez, pero ese es otro tema que después te contaré.
Entonces, la memoria olfativa o que recordemos un olor muy específico es porque las percepciones del olfato y la memoria están ligadas en el cerebro, lo que hace recordar sensaciones y emociones.
Todo esto es posible gracias al bulbo olfatorio que es el encargado de registrar la información percibida, es decir, los olores.
A su vez el bulbo olfatorio está conectado a la amígdala e hipocampo que son partes del cerebro que igualmente se asocian con la memoria y las emociones.
Lo curioso de este caso es que la memoria olfativa funciona regularmente en las sensaciones positivas que vivimos a lo largo de nuestra vida, por eso es que, en la mayoría de los casos un olor te recuerda a un momento o a una persona en específico porque te hizo feliz o tuviste una sensación positiva en general cuando el olor se grabó en tu memoria.
¿Qué es lo que hace que esto sea así?
La relación entre el olfato y el cerebro. Es decir, en nuestro cerebro, hay algunas zonas que se activan cuando olemos un aroma. En este momento, el cerebro ‘captura’ ese instante y siempre que volvemos a inspirar ese olor, lo trae de vuelta a nuestra mente, activando los recuerdos. Así, el olfato está relacionado con la parte emocional del cerebro, esa que se encarga de procesar las emociones.
En definitiva ,siempre me estoy sorprendiendo por todos los proceso que nuestro cuerpo y mente hacen y más la forma en cómo procesamos muchas cosas. En fin, ahora ya sabes por qué los olores pueden recordarnos momentos principalmente felices de nuestra vida.
Comunicóloga por la UNAM. Redactora de temas de bienestar general. Apasionada del mundo digital, soy geek, metalera, petfriendly. Fan de las pelis de terror y el anime. Una de mis frases favorita es: "Yo solo sé que no sé nada” de Sócrates.