Los peores dolores que un humano puede experimentar
Aunque el dolor puede ser subjetivo y es diferente para cada persona, existen algunos dolores que son insoportables como el parto, un golpe en los testículos y las migrañas.
¡Nuestro cuerpo es maravilloso!, es una máquina extraordinaria, capaz de soportar y adaptarse a una gran variedad de condiciones. Sin embargo, hay ciertos límites que, cuando se superan, pueden provocar un dolor insoportable.
Aunque debemos reconocer que el dolor es una sensación complicada de cuantificar y explicar, ya que es una experiencia sensorial y emocional totalmente subjetiva. Hemos recopilado en esta lista los que consideramos los 10 peores dolores que podemos sufrir, de acuerdo a la opinión de expertos y la experiencia de quienes los han sufrido. ¿Estás de acuerdo?
Cuando la vesícula biliar, una especie de reservorio de bilis, sufre infección o inflamación, aparece un dolor muy intenso que puede resultar extremadamente molesto. Debido al grado de dolor que ocasionan los cálculos que se originan por la solidificación de sustancias en la bilis, en ocasiones, se vuelve imprescindible el tratamiento de esta afección.
Aunque los hombres no pueden comprender la agonía del parto, las mujeres no sentirán el dolor que ellos experimentan al ser golpeados en los testículos. Los testículos masculinos tienen una gran cantidad de sensores del dolor llamados nociceptores. Además, los nervios de los testículos también están conectados con el estómago, y por lo tanto, el dolor puede trasladarse a este órgano.
Es probable que en algún momento de nuestra vida suframos una fractura en alguno de los 206 huesos de nuestro esqueleto. El nivel de dolor variará según la gravedad del hueso y cómo se haya producido la lesión. En el momento de una fractura, el cuerpo nos alertará inmediatamente con incómodas sensaciones, las cuales podrían transformarse en una pesadilla si no se toman las medidas oportunas para solucionar el problema.
Es cierto que las quemaduras de tercer grado son las más graves, pero no necesariamente son las más dolorosas. Las de segundo grado, al afectar tanto la epidermis como la dermis, provocan un dolor intenso debido a la activación de una gran cantidad de receptores del dolor en la piel.
En cambio, las quemaduras de tercer grado pueden causar adormecimiento en la zona afectada debido a la destrucción de los nervios. Esto puede disminuir la sensación de dolor, pero no significa que no haya. Además, se trata de un tipo de lesión que requieren mucho tiempo para curarse. Y que pueden dejar secuelas muy dolorosas si la cicatrización no se realiza de forma adecuada.
El proceso del parto es otro de los momentos en los que el cuerpo humano -en este caso el de las mujeres- puede llegar a experimentar un mayor dolor. Ello se debe a las contracciones de los músculos y la presión del feto sobre el cuello uterino. Este dolor se puede sentir como un cólico intenso en el abdomen, las ingles y la espalda, y también como una sensación de malestar general.
La neuralgia del trigémino, también conocida como prosopalgia, tic doloroso o enfermedad de Fothergill, se suele considerar la aflicción más dolorosa conocida en la práctica médica. Esta es un trastorno neuropático que provoca episodios de intenso dolor en los ojos, orejas, labios, nariz, cuero cabelludo, frente, mejillas, boca, mandíbula y el lado correspondiente de la cara. Es tan dolorosa que, en ocasiones, se ha denominado como la ‘enfermedad del suicidio’.
La cefalea en trueno, también conocida como cefalea en estallido. Es un dolor de cabeza de inicio súbito y de carácter grave que alcanza su máxima intensidad en menos de un minuto y se prolonga durante más de 5 minutos. Se considera una urgencia médica por la posibilidad de que exista una enfermedad intracerebral subyacente.
Las migrañas no son simples dolores de cabeza. Quienes las padecen a menudo experimentan un dolor pulsátil, acompañado de náuseas, vómitos y sensibilidad a la luz y el ruido, tanto que pueden ser incapacitantes.
Esta dolencia se caracteriza por un dolor punzante en la cabeza que puede llegar a durar varias horas e incluso días. En los casos más extremos provoca que las personas que lo sufren se vean imposibilitadas de realizar cualquier actividad y solo puedan permanecer tumbadas en la más absoluta oscuridad.
El dolor de muelas, conocido como odontalgia, es una experiencia sensorial desagradable que se origina en los dientes o sus estructuras de soporte. Se caracteriza por una sensación punzante, pulsátil o sorda que puede variar en intensidad y duración. El dolor puede extenderse a otras partes de la cara, como la mandíbula, la sien o el oído, lo que dificulta identificar su origen preciso.
Es una inflamación súbita del páncreas que puede ser leve o potencialmente mortal, pero que en general remite. Las causas más frecuentes son los cálculos biliares y el consumo de alcohol.
Generalmente provoca un dolor intenso en la parte superior del abdomen. En alrededor del 50% de las personas, el dolor atraviesa hasta la espalda. Cuando está causada por cálculos biliares, el dolor se suele iniciar de forma repentina y alcanza su máxima intensidad en unos minutos. Cuando el origen está en el alcohol, el dolor surge al cabo de unos pocos días.
Es importante recordar que el manejo del dolor es un aspecto crucial en la atención médica y que existen diversos tratamientos disponibles para aliviar el sufrimiento de quienes padecen estas afecciones y otras más que también pueden causar gran dolor.
Nota: Muchos indican que el dolor psicológico también puede ser devastador. La pérdida de un ser querido, la depresión clínica o el trastorno de estrés postraumático pueden causar un sufrimiento intenso y duradero.
Con información de Cuídate Plus, Huffpost