La capacidad de entender y procesar información varía de persona a persona, y desde la infancia desarrollamos habilidades ejecutivas que nos permiten adaptarnos a nuestro entorno. Estas habilidades son esenciales cuando aprendemos, ya que influyen en cómo organizamos y aplicamos la información. Comprender cómo se aprende es crucial para enseñar de manera efectiva y para fomentar un aprendizaje duradero.
[Te puede interesar leer: Técnicas de atención plena para combatir miedos y preocupaciones]
Desarrollo de las funciones ejecutivas
Las funciones ejecutivas incluyen la memoria de trabajo, la inhibición de estímulos, la planificación, la resolución de problemas y la flexibilidad cognitiva. Entre ellas, la atención es fundamental, ya que es el proceso que permite que la memoria de trabajo funcione adecuadamente. La eficacia en el aprendizaje no solo depende del estilo de aprendizaje, sino también de la capacidad de organizar y aplicar la información, lo que está intrínsecamente relacionado con nuestras funciones ejecutivas.
Estrategias para entrenar la memoria de trabajo y la atención
Entrenar la memoria de trabajo y la atención no se limita a memorizar datos. A continuación, se presentan algunas estrategias efectivas:
- Juegos numéricos: Jugar con números que encontramos a nuestro alrededor, como teléfonos o matrículas.
- Repetición inversa: Repetir números en orden inverso.
- Cálculo mental: Realizar operaciones matemáticas mentalmente.
- Juegos de palabras: Crear cadenas de palabras que empiecen o terminen con la misma letra.
- Memory: Jugar a hacer parejas de imágenes con tarjetas.
- Series y secuencias: Organizar objetos según color, tamaño u otro atributo.
- Imitar gestos: Repetir los gestos de otra persona.
- Pasatiempos: Resolver sudokus, crucigramas o laberintos.
- Condiciones en tareas: Cumplir tareas bajo ciertas restricciones.
- Subtítulos: Usar subtítulos al ver vídeos para combinar lectura y escucha.
- Hacer listas y recordarlas.
- Rompecabezas
- Juegos de cartas: Participar en juegos que requieren concentración.
- Tareas duales: Realizar dos tareas simultáneamente, como caminar y contar.
[Te puede interesar leer: Cómo detener los pensamientos rápidos]
La importancia del juego
El juego es un aliado esencial en el desarrollo de la atención y la memoria de trabajo. Todos los juegos de mesa implican funciones ejecutivas y ofrecen un entorno ameno y no forzado para aprender. Es fundamental que niños y adolescentes jueguen, no solo de forma individual, sino también en interacción con otros, ya que esto fomenta la atención y la memoria.
Rutinas como aliadas
Establecer rutinas es crucial para desarrollar la atención y la memoria de trabajo. Las rutinas brindan seguridad y permiten anticipar lo que sucederá, lo que facilita el aprendizaje. Al ordenar el entorno y generar secuencias de acciones, las rutinas ayudan a optimizar el desarrollo de habilidades y a hacer más eficiente la toma de decisiones.
Conclusión
Entrenar la memoria de trabajo y la atención es un proceso accesible que puede realizarse a través de juegos y rutinas en la vida diaria. Estas habilidades son fundamentales para el aprendizaje y el desarrollo personal, y su fortalecimiento puede conducir a una mayor eficacia en la vida académica y profesional.
Información de The Conversation