Me recetaron insulina, ¿eso significa que estoy grave?
¿Qué pasa si tu médico te propone el uso de insulina por considerarlo necesario para tu control de glucosa? Existen gran desinformación sobre la insulina.
Si vives con diabetes seguramente sabes de la importancia del autocuidado. Para alcanzar el control se debe llevar un tratamiento que incluye la toma de fármacos, una alimentación balanceada, la práctica de algún ejercicio y el monitoreo de la glucosa, acciones a las que seguro ya estás acostumbrado, pero ¿qué pasa si tu médico te propone el uso de insulina por considerarlo necesario para tu control?
La insulina es una sustancia (hormona) que el cuerpo produce en el páncreas, necesaria para que el organismo utilice la glucosa (azúcar) que recibe de los alimentos como fuente de energía; por lo tanto la insulina es algo totalmente conocido para tu cuerpo e indispensable para la vida.
Haber sido diagnosticado con Diabetes Mellitus tipo 2 (DT2) significa que tienes una alteración relacionada con la insulina porque tu cuerpo ya no es capaz de producir la suficiente cantidad que necesita y/o porque la que produce no funciona adecuadamente, generando niveles elevados de glucosa en la sangre, explica el Dr. Enrique González Hernández, director de la Clínica Especializada en Manejo de la Diabetes.
Ahora te queda más claro porqué toda persona con DT2 podrá necesitar insulina en algún momento de su tratamiento.
Te preguntarás entonces “¿necesito insulina porque ya estoy grave?”. La respuesta es no. Solo hay que entender que con el paso del tiempo tu organismo produce cada vez menos insulina, haciendo indispensable agregar insulina externa para mantener la glucosa estable, es decir, su uso se hace necesario por la evolución natural de la enfermedad.
Sin embargo, también ocurre cuando por descuido no es posible alcanzar los objetivos de glucosa sólo con pastillas aunque se tenga poco tiempo con la condición.
Al inicio es posible que tengas constantes cambios de dosis hasta llegar a la adecuada para ti, esto no significa que la insulina te ha caído mal o que el médico se equivoque, es un proceso normal mientras tu cuerpo responde y se adapta al cambio de tratamiento.
Existen gran desinformación sobre la insulina. Aquí algunos ejemplos:
Toda esa información es falsa, pues la insulina es completamente segura como tratamiento.
Las personas que lamentablemente han perdido la vista o tienen otras complicaciones llegaron a ese punto por estar constantemente con niveles altos de glucosa y no llevar los cuidados necesarios.
Lo primordial ante cualquier cambio de tratamiento es aclarar las dudas con el equipo médico para tomar decisiones en conjunto y realizar puntualmente todas las indicaciones.
Mantener el nivel de azúcar en sangre tan cerca de lo normal como sea posible es lo ideal para prevenir las complicaciones.
Para alcanzar esta meta nada como los dispositivos médicos, esas herramientas que permiten a los pacientes hacer uso de la tecnología para mejorar su tiempo de glucosa en rango y, por ende, mejorar su calidad de vida.
Recientemente se lanzó una microinfusora de insulina que cuenta con filtros inteligentes que permiten ajustes en la administración de insulina para ejercicio, días de enfermedad, estrés o periodo premenstrual.
La cánula y el catéter se colocan en un ángulo de 45 grados sobre la superficie de la piel y, junto con el mecanismo de la microinfusora, liberan de manera programada y automática microdosis de insulina de acción rápida, así como bolos en cada alimento simulando el funcionamiento de un páncreas sano, lo que contribuye a que:
México ocupa el quinto lugar en el mundo con más habitantes con diabetes, mientras que a nivel internacional, según la última encuesta de la Organización Mundial de la Salud, había 430,000, 000 de pacientes en 2017 con diabetes y más de 217,000,000 sin diagnóstico.