¿Cómo quito el olor de mis manos?
Frótalas con limón
Si manipulaste pescado en la cocina, esta es una forma segura de deshacerse del olor a pescado. Corta un limón por la mitad y exprime una mitad sobre cada mano. Frótate las manos y enjuaga. Si persiste, combina bicarbonato de sodio y limón.
Lávate con jabón y azúcar
Si no tienes limón a la mano, vierte una cucharada de jabón líquido en la palma de la mano. Agrega una cucharada de azúcar al jabón y frota las manos bien a fondo. Luego enjuaga. La combinación del jabón con la abrasión del azúcar quitará el olor.
Frota las manos en acero inoxidable
Algunos chefs aseguran que el acero inoxidable hace desaparecer el olor a pescado. Frota las manos en la pileta o sobre algún artefacto de acero inoxidable y luego lávalas como siempre.
La cocina todavía huele…
Quema pan y usa amoniaco
No tiene nada de malo que una cocina huela a comida. Pero si el olor a comida se torna desagradable, los licenciados en tecnología de los alimentos dicen que una solución rápida es quemar algunas rebanadas de pan.
Como lo leíste: deja quemar una rebanada de pan en la tostadora. Eso absorberá el olor persistente. Sólo asegúrate de que el pan no se prenda fuego.
Por supuesto, la cocina olerá a pan quemado, pero este olor al menos no persistirá demasiado tiempo. Para facilitar el proceso, pon amoníaco en un recipiente pequeño poco profundo y déjelo un la cocina durante un día.
Hierve algunas cáscaras de naranja
Si se trata de un olor que ya está desapareciendo, puedes tomar una medida menos drástica y crear un aroma placentero para cubrir el olor desagradable. Para ello, hierve a fuego lento cáscaras de naranja y un poco de canela en agua durante algunos
Vinagre blanco
Puedes rociar el suelo y las paredes con un poco de vinagre blanco, el cual es sumamente efectivo para absorber el olor del pescado y eliminarlo rápidamente.
Canela
La canela sobresale por su maravilloso aroma. Calienta el horno. Una vez caliente pon en una bandeja unas cuantas ramitas de canela y hornea durante 5 a 10 minutos. Luego apaga el horno y con cuidado de no quemarte abre la puerta, para que el aroma salga.