Alimento tradicional japonés que tiene un fuerte olor a amoníaco y un sabor no muy agradable. Sin embargo, su consumo puede estar relacionado con una mayor longevidad y otros beneficios.
¿Quieres vivir más tiempo? Si es así, puede que quieras probar el natto. Este alimento tradicional japonés elaborado con soja fermentada ha sido relacionado con una serie de beneficios para la salud, incluido un menor riesgo de enfermedades cardíacas, osteoporosis y cáncer.
La longevidad es un objetivo que persiguen muchas personas. Lo cierto es que no hay fórmulas mágicas ya que depende de numerosos factores, entre ellos la biología. Sin embargo, llevar una vida sana y una buena alimentación pueden contribuir a alcanzarla. En este sentido, algunos estudios sugieren que el consumo de alimentos fermentados, como el natto, podría ser beneficioso.
Un estudio realizado por la Universidad Metropolitana de Osaka sugiere que el consumo de natto puede estar relacionado con la longevidad. La ingesta de natto aumentaba la esperanza de vida en gusanos Caenorhabditis elegans. El equipo científico cree que esto se debe a que el natto contiene una bacteria llamada Bacillus subtilis, que tiene propiedades antioxidantes.
También investigaron la tolerancia al estrés, que se ha comprobado que está correlacionada con la longevidad, y descubrieron que aumenta la resistencia a la luz ultravioleta y al estrés oxidativo.
“Por primera vez, hemos podido demostrar la posibilidad de efectos de prolongación de la vida de ‘Caenorhabditis elegans’ mediante la ingestión de ‘Bacillus subtilis var. natto’. Esperamos que futuros experimentos con mamíferos y estudios epidemiológicos ayuden a conseguir una sociedad sana y más longeva si podemos aplicar esta investigación a los humanos“, ha remachado la líder del trabajo, Eriko Kage-Nakadai.
El natto es un tradicional desayuno que se sirve en el norte de Japón, aderezado con mostaza, puerro picado y shoyu (‘salsa de soja’) y acompañando un arroz blanco.
Se elabora con semillas de soja ablandadas que han sido hervidas o cocidas al vapor y fermentadas con una bacteria llamada Bacillus subtilis var. Su fuerte olor y textura gelatinosa como la de un moco lo convierten en un alimento no muy agraciado o apetitoso, algunos dicen que que su olor es muy parecido al amoníaco, pero también es rico en nutrientes y puede tener propiedades saludables.
El proceso de fermentación dura entre 12 y 16 horas, y durante este tiempo las bacterias producen una serie de enzimas que transforman las proteínas y los carbohidratos de la soja. Esto le da al natto su característico aspecto gelatinoso y su fuerte olor.
El natto es rico en vitamina K, que ayuda a prevenir la arteriosclerosis. Un estudio realizado en ratones encontró que la ingesta de natto reducía significativamente la acumulación de placa en las arterias.
Algunos otros estudios han sugerido que el consumo de natto podría tener los siguientes beneficios para la salud:
Es importante mencionar que el extracto de natto contiene una enzima llamada natokinasa, que tiene propiedades anticoagulantes. Por esta razón, las personas que toman anticoagulantes deben consultar con su médico antes de consumir natto.
Con información de El País
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