Mientras las promesas se cumplen, te damos algunas ideas para encontrar el alivio, aunque sea de manera temporal.
El dolor de articulaciones es un problema frecuente y a menudo provoca debilidad corporal, especialmente en los ancianos.
Las condiciones desencadenantes incluyen la osteoartritis, un tema común en personas mayores de 60 años, que ocurre cuando el cartílago que recubre los extremos de las articulaciones (sobre todo en las caderas, las rodillas y la columna) se desgasta hasta degradar el hueso; la artritis reumatoide, una enfermedad autoinmune, que puede presentarse a partir de los 25 años y en la que el cuerpo daña su propio tejido, generando inflamación alrededor de las coyunturas; la osteoporosis, frecuente en edades avanzadas y que provoca la descalcificación gradual de los huesos; y la fibromialgia, una condición en la que se presenta dolor no solo en las articulaciones sino también en los músculos.
Si este mal te aqueja de manera crónica, deberías consultar a un especialista, para identificar la causa y recibir un tratamiento, que podría incluir medicamentos. Varias terapias naturales también pueden brindarte alivio, aquí te presentamos algunas.
Los pimientos picantes contienen capsaicina, que bloquea las señales del dolor. Espolvorea ½ cdita. de chile en polvo (o pimienta de Cayena) en 250 ml de aceite de oliva tibio. Aplica en el área con guantes de goma y masajea (ojo, si la piel está lesionada podría arder). Enjuaga.
También puedes cocinar a fuego lento 1 cda. de pimienta de Cayena en 500 ml de vinagre de manzana por 10 minutos. Deja enfriar, moja un trapo limpio en la solución y presiona con este sobre las articulaciones.
Mezcla 1 cdita. de cúrcuma con 1 cda. de jengibre rallado. Agrega agua hasta crear una pasta y moja en la solución un trapo limpio. Presiona sobre el área. O mezcla 1 cda. con 1 taza de leche tibia y bébela antes de dormir.
La grasa láctea favorece la absorción del compuesto activo de la cúrcuma. Añade 1 cdita. de miel para dormir mejor.
Los expertos les atribuyen propiedades analgésicas. Agrega 2 a 3 ml a 30 ml de aceite base (de almendras, oliva, girasol) y masajea o presiona el área. Agrega hasta 10 gotas en tu baño. Prueba con el aceite de eucalipto, benjuí, manzanilla, lavanda, enebro o romero. Se cree que el de pimienta negra, mejorana o jengibre, ayudan a la circulación.
Consume frutas y verduras de colores intensos, cuyos antioxidantes protegen la salud. Toma tabletas de vitaminas C y E, y de minerales como cinc. Los expertos afirman que la glucosamina previene la degeneración y el dolor de articulaciones.
¿Cómo cuidas tus articulaciones?
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