Ya que lo habitual después de pelar una cebolla al momento de cocinar, es colocarla con el resto de la basura. Pero esto es algo que se puede utilizar para otro tipo de cosas.
Cuando se trata de condimentos, puede ser una gran aliada, aunque parezca extraño. Las posibilidades son muy amplias cuando la utilizas en la cocina, solo tienes que saber cómo.
También lo puedes mezclar con pimienta, sal u otras especias para darle mucho sabor a tus recetas. En caso de que desees probar algo más curioso, puedes añadir piel de zanahoria seca, calabacín o hasta cualquier cáscara de alguna fruta.
Estas son algunas maneras simples de aprovecharla en la cocina:
Es bastante habitual usar la piel de cebolla en la cocina para hacer más intenso el sabor de los caldos y sopas. Otra alternativa es tostarla en el horno cuando prepares un asado. Consiguiendo un color mucho más intenso en su jugo y en la salsa, comparado a usarla en agua y aceite.
Suele utilizarse el polvo de cebolla o el ajo granulado para ofrecer sabor a muchos de los platos con, sin invertir tanto esfuerzo. Puedes usar la piel de cebolla seca, en este caso, para dar sabor a diversos platos. Solo tienes que agarrar unas cuantas cáscaras de cebolla que ya se encuentren secas. Pásalas por la trituradora de alimentos o una batidora y obtendrás un polvo fino, que puedes usar para cualquier clase de preparación.
Usa la piel de cebolla morada con un poco de agua, limón y miel de abeja. Coloca a hervir las cáscaras en agua, cuela y añade la miel junto con el limón. Lo recomendable es tomar una taza en la noche por no más de tres y solicitar atención médica en caso de que los síntomas continúen.
Si ninguna de las alternativas anteriores te convencieron, puedes incorporarla a alguna mezcla de pan rallado. Sin embargo, debes tomar en cuenta que tiene que estar bien triturada para que no sea extraña al comer. Solo tendrás que macharla en una batidora y después agregarla, siempre y cuando esté bastante seca.
Tienes que colocar dos puñados de piel de cebolla en un envase de plástico y cubrir con agua. Luego tienes que dejar reposar la preparación por 24 horas, colar y aplicar en las plantas cada 15 o 20 días. Este es un abono que se puede almacenar en el refrigerador por hasta 3 semanas. Representa incluso una manera ecológica y económica de abonar las plantas, promoviendo así su crecimiento.
Este es un té de cáscara de cebolla que se puede usar en alguna receta como refuerzo del sistema inmunitario. Para su preparación, necesitas una cebolla de color naranja y agua hirviendo. Lavas las cáscaras y colócalas en una taza con agua caliente. Deja que repose y después retíralas del fuego antes de consumir, añade un poco de miel si lo deseas. A pesar de que en un inicio es amargo, ofrece muchos beneficios para la salud.
Las cebollas combinan a la perfección con, prácticamente, cualquier alimento. Por lo que puedes usar dicho sazonador en una gran cantidad de preparaciones. Algunas de estas pueden ser:
Aparte de esto, puedes probar a añadirlo a la masa de los canelones para que puedan tener un toque diferente y crujiente. O hasta lo puedes usar para darle más sabor a las palomitas de maíz. Solo tienes que experimentar y descubrir novedosas formas de usar un sazonador casero como este en tus platos favoritos.
Con información de Bioguía