OMM, la técnica de un minuto que cambiará tu vida

OMM significa dar más vida a tus días. Vivir de manera más consciente. Vivir apasionadamente. “Meditar no es cerrar los ojos, meditar es abrir los ojos a la vida”.

¿Cómo te caería un poco de desapego y distancia de tus emociones negativas? ¿Te gustaría tener más determinación para alcanzar tus objetivos de vida? ¿Quieres vivir más relajado? ¿Te gustaría aumentar tu concentración? ¿Sabes lo que en realidad deseas?  Patrizio Paoletti puede ayudarte a responder esos cuestionamientos con una herramienta: Un minuto de meditación.

Ya no es ningún misterio que la meditación produce, entre otros beneficios, aumento de la concentración, de la productividad, de la creatividad, además de la reducción de la ansiedad, la depresión y el enfado y, en consecuencia, un incremento auténtico de la inteligencia emocional.

Paoletti es uno de los más grandes oradores de Italia y el mundo. Es un filántropo e investigador de la mente humana que desde hace tres décadas trabaja para el desarrollo personal a través del programa Human Inner Desing y la School of Self-Awareness.

El autor del libro The One Minute Meditation estimula a las personas a ir más allá para alcanzar la realización, por eso te pide que te cuestiones —en un mundo tan interconectado y que se mueve a una velocidad vertiginosa—en dónde estás, cuál es tu papel, qué relación tienes contigo mismo.

Como buenos hijos del siglo XXI seguro que a menudo pasas horas en el tráfico, destinas buena parte del día al trabajo, estás pegado al celular porque sientes la necesidad de estar conectado 24/7. La sobre estimulación y el estrés gobiernan tu vida, así que cada vez es más difícil que halles tiempo para preguntarte quién eres y qué es lo que de verdad quieres.

“Lo que digo en OMM es que meditar no es cerrar los ojos, es abrir los ojos a la vida, es entender el lugar en donde estamos, porque desde ahí es desde donde absorbemos todo. Para cambiar el mundo, hay que cambiar nosotros, nuestros hábitos” explica este hombre de paz.

Paoletti —quien hace unos días habló ante los diputados mexicanos para hacerles ver la importancia de la meditación—  recordó que ahora se sabe que el cerebro es plástico, que sí se renueva y se adapta a los estímulos. “Somos interactivos, fuertemente interactivos, absorbemos todo”.

OMM es la síntesis extrema de 4,000 páginas de la pedagogía sobre el tercer milenio; es el compendio 40 años de evidencia científica para buscar la felicidad y la realización.

Esta práctica te explica cómo mirar más allá de tus creencias y de tus convicciones. Paoletti parafrasea al Dalai Lama: Aún teniendo todas las comodidades exteriores , nunca experimentarás el sentimiento de gozo y felicidad que estás buscando sin una disciplina interior que mantenga en calma tu mente.

Esta forma de meditación está alejada de la que te imaginas cuando escuchas la palabra. OMM pugna por las acciones, porque son las acciones las que cambian la vida. Meditar es actuar, meditar es una acción.

Otro pilar fundamental de OMM es el desapego. “Estás platicando con tus hijos de un tema muy importante, suena el teléfono y sientes la imperiosa necesidad de contestar como si te estuviera llamando el presidente del universo para avisarte sobre el fin del mundo. Esa llamada puede esperar”.

Paoletti te hará ver que te pierdes en nimiedades. “Nos perdemos en la periferia, y para calmar el estrés hay que dejar ir la periferia, hay que acostumbrarnos a elegir lo que es verdaderamente importante para mí, de lo contrario la periferia me come y debemos vivir en el centro”.

Falta de enfoque, otro gran problema

Según este escritor italiano, uno de los más grandes problemas de la humanidad en la actualidad es la falta de enfoque ante tanta distracción.

Citó una investigación que arrojó que hace 30 años las personas retenían en la cabeza el 50 por ciento de lo escuchado, mientras que ahora se recuerda menos del 8 por ciento. “Si te interesa lo que estoy diciendo retendrás el 8 por ciento, si te aburres, mucho menos”.

El otro componente para un cambio de vida positivo es la distancia. Alejarse de las emociones negativas significa focalizar, ver con más claridad, entender lo que hará la diferencia en la vida.

“Si queremos mejorar tenemos que buscar lo que hace la diferencia y para ello necesitamos distancia para enfocar y ver con claridad”.

Y para cerrar el círculo está la determinación para el cumplimiento de acciones concretas, y la primera acción concreta es tomarte un minuto de calma. “Cualquiera que sea la acción urgente puede esperar un minuto. Si tienes que hablar con tu jefe, tomate un minuto y medita, eso no cambiará lo que él tenga que decirte, pero sí cambiara tu actitud ante él, encenderás tu capacidad resiliente, serás capaz de soportar la dificultad y dejar atrás el estrés.

Yo me amo, una revolución

Patricio Paoletti, quien ofrecerá por primera vez en México un seminario los días 13 y 14 de julio, asegura que el cambio empieza cuando te haces la promesa de amarte a ti mismo. “El 85 por ciento de las personas vive para la aprobación de los demás, por eso amarse uno mismo es una revolución, es paz, es distancia. Amarse a uno mismo significa ‘yo mejor que yo’, significa que cada día intentaré ser mejor que yo mismo, que ni un día dejaré de perseverar, porque si lo hago el cerebro interpreta que ya no estoy interesado en esa promesa de cambio y regresan mis viejos esquemas”.

OMM es para todos, dice Paoletti. “Todos queremos mejorar, todos tenemos ese sentido sutil de insatisfacción, de orfandad. Somos huérfanos de nosotros mismo, y todos queremos ser más nosotros mismos”.

México, una bandera para América

Patricio Paoletti habló de la importancia de México en el nuevo orden mundial. “México puede ser una bandera, pero para hacerlo México tiene que usar OMM, pues los países están conformados por personas. Estamos a punto de ommizar a una nación”.

Patricio Paoletti está seguro de que, si te hubieras puesto a meditar un minutos antes de tomar una decisión, seguramente hubieras decidido algo distinto. “Si logras hacer lo que es más importante para ti, tu vida sube a otro novel de gozo, de felicidad; trabaja en ti y piensa en que es lo que puedas darle al mundo”.

Pasamos la vida perdiéndonos de la vida, que es aquí y ahora, este instante.