Podremos revertir el envejecimiento y la muerte será opcional

¿Es inevitable la muerte?

Según José Luis Cordeiro —miembro de la Academia Mundial de Arte y Ciencia— y David Wood —pionero de la industria de los smartphones y creador del sistema operativo Simyan para Nokia— la muerte será opcional en unos 30 años gracias a los avances exponenciales en inteligencia artificial, regeneración de tejidos, las drogas antiedad y las terapias genéticas o inmunológicas que resolverán —de hecho ya lo están haciendo— el problema del envejecimiento del cuerpo humano, un envejecimiento considerado ahora como una enfermedad que puede y debe ser curada.

El envejecimiento, al igual que el clima, no respeta límites nacionales o étnicos, afecta a cada grupo de la humanidad más o menos por igual. Se habla de las disparidades que existen al respecto como, por ejemplo, que a pesar de que Estados Unidos es el país que más gasta en salud por habitante, ni siquiera se encuentra en el grupo de los 30 países con mayor esperanza de vida.

Cordeiro, en entrevista para Selecciones, explicó que el ser humano está muy cerca de vivir indefinidamente joven. “Ya se ha logrado el rejuvenecimiento de algunos animales, pero se necesitan ensayos clínicos en humanos.

Actualmente se está experimentando en Estados Unidos en Elizabeth Parrish, quien durante dos años ha sido sometida a un tratamiento de rejuvenecimiento biológico con dos terapias, las cuales anteriormente solo se habían probado en ratones. “No sabemos cómo va a ir esto, así que hay que seguir haciendo más investigaciones”.

Cordeiro sabe que le llaman  mentiroso, charlatán y vendehumo, pero ante la incredulidad de la gente, el director del Millennium Project dice que lo que sucede es que la sociedad desconoce los avances que se están obteniendo en estos campos.

“No saben que desde 1951 se descubrió que el cáncer es biológicamente inmortal; crece, se reproduce y no envejece, por eso al cáncer hay que matarlo, porque de lo contrario no muere. Ahora mismo la gente desconoce que ya hay ratones que están viviendo el equivalente a 200 años humanos, que se ha multiplicado por cuatro la vida de los mosquitos, por 10 la vida de gusanos y que en el 2012 hubo un premio Nobel de fisiología y medicina por el rejuvenecimiento celular. Ya se conoce el proceso de rejuvenecimiento de las células” explica enfático. “Estamos del lado correcto de la historia” puntualiza.

Cordeiro, ingeniero de profesión, afirma que en su carrera cuando algo funciona no se cambia, y que en la naturaleza ya existe la inmortalidad —menciona a las bacterias, biológicamente eternas— así que el hombre no está inventando nada.

El ser humano, cada vez más longevo

La expectativa de vida en la década de los cincuenta era de 55 años para las mujeres y de 48 para los hombres; ahora las mujeres viven 77 y los varones 72. Pero lo que es impresionante es que el crecimiento de los jóvenes de 0 a 19 años del 2020 al 2030 será de 0.3 por ciento, mientras que el de las personas de más de 80, 90 o más será del 3.2 por ciento. Y entre el 2030 y el 2040 el crecimiento de 0 a 19 años será de 0.9 por ciento, mientras que el de los mayores de 80 años será del 4.2 por ciento.

La media de la esperanza de vida ha aumentado radicalmente en las últimas décadas gracias a los avances científicos. Compañías como Google ya se han dado cuenta de que curar el envejecimiento es posible y por eso están creando empresas como Calico o Human Longetivity que investigan al respecto, y también existen empresas sin ánimo de lucro como la Fundación Methuselah.

“Dentro de poco veremos hacia atrás y recordaremos lo primitivo que somos hoy, que dejábamos que la gente muriera, que aceptábamos que la gente muriera, qué terrible” dijo.

La muerte de la muerte es un libro divulgativo en el que con un lenguaje accesible se exponen los avances tecnológicos y científicos que en unas décadas lograrán que la inmortalidad sea una realidad. En él los autores, Cordeiro y Wood, defienden no solo la moralidad, sino también la urgencia de abordar este tipo de investigaciones.

La historia de la humanidad ha estado marcada por el hecho fatal de la muerte. Religiones, fronteras y progresos nacen del atávico miedo a la muerte. Hasta hace poco tiempo, ese miedo y ese deseo de supervivencia solo encontraba consuelo en paradigmas religiosos, pero a juicio de José Luis Cordeiro y de David Wood, el hecho incontrovertible de la muerte ya puede rebatirse con fundamentos científicos.

La ciencia ficción de hoy es la ciencia real del mañana, finaliza Cordeiro.