Por este motivo no debes usar los audífonos todo el día
Los audífonos cada vez están más presentes en nuestra vida diaria, pero su uso constante podría suponer un riesgo a nuestra salud.
Los audífonos son dispositivos electrónicos de uso común que acompañan a otros aparatos como los celulares, computadoras, televisiones y más; sin embargo, una investigación publicada en enero señaló que utilizar de manera prolongada aparatos intrauditivos puede provocar problemas en la producción y eliminación de cerumen o cerilla que se encuentra en los oídos.
El cerumen es una secreción impermeable que humedece el canal auditivo y actúa como una protección para prevenir que se produzcan infecciones.
De acuerdo con el medio The Conversation, la cerilla se crea por “secreciones de las glándulas sebáceas y las glándulas sudoríparas liberadas por los folículos pilosos, que luego atrapan el polvo, las bacterias, los hongos, los pelos y las células muertas de la piel para formar la cera”.
El cerumen se secreta hacia el exterior del oído, a través del movimiento de la mandíbula y de esta manera se evita que el canal auditivo se llene de células muertas. Estas son algunas cosas que el cerumen podría revelar de tu salud.
Ya que la mayoría de los auriculares se meten al canal auditivo, el proceso de la creación y eliminación de cerilla se ve afectado, por lo cual se recomienda utilizar audífonos de manera moderada.
Uno de los efectos del bloqueo del cerumen es que éste se endurezca y se dificulte su salida, por lo cual se puede generar una inflamación en el oído y una posible infección por la acumulación de humedad y bacterias.
The Conversation añadió que la acumulación de cerilla puede causar problemas de audición acompañados con la siguiente sintomatología: dolor en los oídos, mareos, sensación de escuchar un zumbido, picazón y vértigo.
Por lo tanto, se recomienda usar audífonoes supraaurales o de diadema, ya que tienen contacto con las orejas y las bocinas que producen el sonido no están directamente en el canal auditivo con esto el aire fluye en la zona y se evita la acumulación de cerumen, así como la propagación de bacterias.
Con información de La Razón.