¿Por qué necesitamos parpadear?
La mayoría de nosotros parpadea aproximadamente 15 veces por minuto. Esta acción protege el ojo, cuya mayor parte está protegida dentro de la cuenca, una cavidad ósea recubierta de grasa que a su vez...
Pero, ¿son los ojos los sensores más delicados del cuerpo? Están abiertos y casi una décima parte de su superficie total, queda expuesta al medio ambiente, al viento y posiblemente al polvo.
Los ojos necesitan lubricación frecuente. Además, la parte frontal que recibe la luz debe conservarse limpia y clara como el cristal para distinguir bien. El parpadeo sirve a este doble propósito. Los párpados se cierran y abren, cubriendo cada ojo con una película de lágrimas, retirando residuos diminutos para limpiar y lubricar su superficie. Parpadear puede tener otras causas: proteger nuestros ojos contra un resplandor repentino, por ejemplo. Los ruidos fuertes y la ansiedad también desencadenan esta acción.
Con ayuda de cámaras escondidas, lámparas de luz infrarroja y aparatos de medición especiales, los científicos han estudiado las reacciones oculares humanas en distintas circunstancias, como asambleas, tránsito vehicular intenso y bajo diversos tipos de estrés. Han descubierto que se parpadea menos cuando se está atento; una persona que lee una novela parpadea unas seis veces por minuto, pero al conversar duplica esta frecuencia. Se sabe también que quienes conducen automóviles, parpadean menos en las calles de la ciudad, que es donde deben poner más atención, que en la carretera.
Cuando estamos aburridos parpadeamos con lentitud. En un experimento, se pidió a un grupo de voluntarios que escucharan una lenta y monótona serie de tonos. En el transcurso de la prueba, la duración del intervalo entre cada parpadeo aumentó en más de 30 por ciento.
El nerviosismo provoca que se parpadee con frecuencia; por esa razón, se adiestra a los lectores de noticias en la televisión para que parpadeen normalmente, y así reflejen serenidad y autocontrol. Los abogados afirman que, bajo un escrutinio riguroso, los testigos parpadean con más frecuencia que quienes no son hostigados. Si un político parpadea en demasía durante una entrevista televisada, se interpreta como un síntoma inequívoco de tensión.
El mundo y sus porqués