¿Lo Sabías?
¿Por qué tenemos huellas dactilares? 12 hechos sobre ellas que te sorprenderán
Por increíble que parezca, no se trata sólo de desbloquear un smartphone o atrapar a un delincuente. Esto es lo que nos dice la ciencia.
Por increíble que parezca, no se trata sólo de desbloquear un smartphone o atrapar a un delincuente. Esto es lo que nos dice la ciencia.
La mayoría de la gente asocia las huellas dactilares con la capacidad de resolver misterios, pero, en primer lugar, ¿por qué tenemos huellas dactilares? Resulta que esos espirales y bucles únicos son un misterio en sí mismos. ¿Existe una razón evolutiva para las huellas dactilares (como la hay por la que nos sonrojamos )? ¿O es simplemente un hecho extraño sobre el cuerpo humano?
“Ciertamente no te dicen nada sobre tu personalidad o tus habilidades”, dice Denis Headon, biólogo del desarrollo e investigador principal de la Universidad de Edimburgo que estudia el desarrollo de las estructuras de la piel, incluidas las huellas dactilares.
Cómo y por qué se forman en las manos humanas ha sido durante mucho tiempo un misterio científico, y no hay muchas respuestas sencillas sobre nuestras huellas dactilares. (Existen muchas teorías (tal vez sean rasgos heredados ) y mitos). Pero investigaciones recientes nos están acercando a algunas respuestas. Esto es lo que sabemos.
Hay mucho más en tus huellas dactilares que su singularidad y su utilidad para los detectives. De hecho, estudios recientes sugieren que probablemente haya múltiples respuestas a esta pregunta.
Los científicos creen que evolucionaron para mejorar nuestro sentido del tacto. Las crestas de las huellas dactilares amplifican las vibraciones de las superficies que tocamos, permitiéndonos discernir texturas con mayor precisión. Sin huellas dactilares, la interacción con objetos sería mucho más difícil.
Las crestas también son claves para agarrar objetos. Un estudio de 2020 en PNAS reveló que las crestas regulan la humedad en las yemas de los dedos, lo que es crucial para el agarre, especialmente en superficies mojadas.
“Las glándulas sudoríparas que tenemos en las palmas de las manos y las plantas de los pies emergen de la parte superior de las crestas y ayudan a mantener los niveles de humedad adecuados para agarrar cosas”, explica Headon. “Este aspecto de humedad del sudor es similar al efecto que produce alguien lamerse el pulgar para poder hojear las páginas de un libro”.
Sabemos que son pequeñas crestas en nuestra piel, y las impresiones que quedan después de tocar algo están impresas por el sudor y el aceite en la parte superior de estas crestas. Sabemos que estas crestas en las puntas de los dedos se forman antes de nacer.
Y hasta que Headon probó las teorías sobre el desarrollo de las huellas dactilares, sabíamos que las razones detrás del patrón único de espirales y bucles de nuestras huellas dactilares eran un misterio de larga data.
Pero en 2022, el equipo de Headon publicó un artículo histórico en la revista Cell que reveló no sólo el proceso mediante el cual se forman, sino también los genes responsables. Probaron las teorías vigentes sobre el desarrollo de las huellas dactilares y descubrieron que los genes del desarrollo de las extremidades desempeñaban un papel clave a la hora de influir en el resultado de los patrones de las huellas.
Entonces, ¿por qué las tenemos, qué tienen de especial y qué hechos extraños han descubierto los científicos? Esto es lo que sabemos.
Estas crestas en las puntas de los dedos se forman en el útero, comenzando alrededor de las 10 semanas de gestación. Cuando el feto tiene alrededor de 17 semanas, estos patrones caprichosos, aleatorios y totalmente únicos están completamente formados. Esto significa que tus huellas digitales han estado contigo desde antes de que nacieras.
Las investigaciones han demostrado que las crestas en nuestras huellas dactilares aumentan nuestra sensibilidad táctil. Según un estudio publicado en el Journal of Neuroscience, las crestas de nuestras huellas dactilares presentan campos receptivos finamente sintonizados y pueden ayudar a explicar la sensibilidad del tacto humano.
Según la investigación de Headon, las huellas dactilares comienzan pareciéndose a los mismos parches de células que luego formarán folículos pilosos. Pero, en lugar de convertirse en folículos pilosos, estas células forman crestas con patrones en espirales y bucles gracias a pequeñas diferencias en la expresión de los genes responsables de formar las estructuras de la piel.
Las formas arqueadas, circulares y verticiladas presentes en las huellas dactilares pueden explicarse, al menos en parte, a través de una teoría propuesta por el matemático británico Alan Turing. Las variaciones en la expresión genética han establecido lo que los científicos denominan un “patrón de Turing”.
En la década de 1950, Turing postuló que “las sustancias producidas por las células de un embrión promoverían la formación de una estructura, pero actuarían junto con sustancias opuestas que suprimirían el crecimiento de dicha estructura”, según explica Headon.
“Al interactuar entre sí, el promotor y el supresor opuestos en este esquema pueden crear un patrón que tenga unidades repetidas con un espacio uniforme entre ellas, como el que observamos en nuestras numerosas crestas de huellas dactilares”.
Aunque las teorías de Turing estaban limitadas por la comprensión de la biología en ese período, los hallazgos de Headon y sus colegas respaldan en gran medida las ideas de Turing. “Hemos descubierto que estas moléculas promotoras y supresoras se producen durante el desarrollo de las huellas dactilares de una manera que sugiere que actúan de acuerdo con la concepción de Turing (aunque él no estudió ni mencionó específicamente las huellas dactilares)”, señala Headon.
“El patrón de Turing es susceptible a eventos aleatorios mientras se forma antes del nacimiento, y esta sensibilidad a la aleatoriedad probablemente desempeñe un papel fundamental en la singularidad de cada huella dactilar”.
El patrón de Turing que probablemente crea nuestras huellas dactilares también es responsable de otros patrones que ocurren en la naturaleza, como las rayas de cebra y las manchas de leopardo.
Este trastorno genético, llamado adermatoglifia, es extremadamente raro y provoca la falla de la formación de crestas antes del nacimiento. Las yemas de los dedos de las personas con adermatoglifia son completamente planas, pero por lo demás, las personas con esta afección están sanas. El trastorno genético sólo se ha encontrado en unas pocas familias y no se comprende del todo, dice Headon.
¿Has notado que es mucho más difícil que te salgan ampollas en las yemas de los dedos de las manos o de los pies? Una teoría es que las crestas dérmicas que forman nuestras huellas dactilares ayudan a prevenir las ampollas. Los estudios sugieren que las crestas pueden permitir que nuestra piel se estire y se deforme más fácilmente, lo que puede protegerla de daños y ampollas.
Los monos y los simios tienen huellas dactilares que funcionan de manera similar a las de los humanos. Pero el koala, que es un pariente muy lejano del ser humano, es el único otro animal que también tiene huellas que se parecen y actúan como las nuestras.
A medida que envejeces, es natural que tu piel cambie con la edad. Pero las arrugas no aparecen en las yemas de los dedos. Lo que significa que puedes esperar que tus huellas dactilares sigan siendo las mismas que el día en que se formaron.
Los científicos clasifican los patrones como verticilos, bucles o arcos. La disposición y ubicación de las mismas es lo que hace que tus huellas dactilares sean un identificador único. Y según la ciencia, todos los patrones son gracias a la genética, similar al color de ojos o al color de cabello.
¿Celebrar un acuerdo en la antigua Babilonia? Podrías usar una huella digital para sellarlo. Esto sugiere que las personas que vivieron bajo el reinado de Hammurabi entendieron la naturaleza especial de estas huellas.
“Otras especies de animales, como los ratones, tienen conjuntos de crestas más simples en los dedos (o dígitos, para usar un término más técnico) que los animales trepadores”, dice Headon. “Algunos monos usan sus colas como una quinta extremidad para ayudarlos a trepar, y la piel en la parte inferior de su cola tiene las mismas crestas que tenemos en las palmas y las plantas de los pies, aunque no los arcos, bucles o remolinos más complejos que se encuentran a nuestro alcance”.
Con información de rd.com 12 Surprising Facts About Fingerprints, Including Why We Even Have Them
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