Es común que uno de tus testículos sea ligeramente más grande o cuelgue más bajo que el otro, pero cambios repentinos o dolorosos requieren atención médica. Varias condiciones pueden ser la causa de esto, según la información de Medical News Today:
- 1. Epididimitis: Inflamación del epidídimo, frecuentemente causada por infecciones bacterianas o de transmisión sexual. Provoca dolor, ardor al orinar e inflamación testicular. El tratamiento suele incluir antibióticos, reposo, elevación del escroto y antiinflamatorios.
- 2. Orquitis: Inflamación del propio testículo, a veces tras paperas o una complicación de epididimitis . Si es viral, el tratamiento es sintomático; si es por una ETS, se recetan antibióticos.
- 3. Hidrocele: Acumulación de líquido en la capa que rodea el testículo, común en recién nacidos, pero también en adultos . Suele ser indoloro y a veces desaparece solo; si persiste, puede requerir cirugía.
- 4. Varicocele: Venas dilatadas en el escroto, habitualmente indoloras, aunque pueden producir sensación de pesadez y afectar la fertilidad. El tratamiento puede incluir analgésicos o cirugía si causa molestias o baja conteo espermático.
- 5. Quiste epididimal (espermatocele): Son bultos llenos de líquido en el epidídimo. Usualmente benignos y asintomáticos, pero pueden removerse si causan molestias .
- 6. Torsión testicular: Emergencia médica: el testículo se tuerce y pierde suministro de sangre. Causa dolor intenso, náusea e inflamación abrupta. El tratamiento inmediato es crucial (deslaciamiento manual o cirugía en menos de 6 horas).
- 7. Cáncer testicular: Aunque menos frecuente, se manifiesta como bulto indoloro y endurecido. Al detectarlo a tiempo, la supervivencia a 5 años es superior al 95 %.
- 8. Otras causas: Hernia inguinal, traumatismos, inflamación vesical o cardíaca también pueden causar inflamación testicular
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¿Cuándo acudir al médico?
Consulta urgente con un urólogo si notas:
- Dolor intenso, nauseas o fiebre
- Bulto o cambios en forma o consistencia
- Dificultad para orinar, sangrado o secreción
- Enrojecimiento o sensibilidad del escroto
El médico realizará examen físico, análisis de orina, ultrasonido testicular y, si hay sospecha de cáncer, marcadores tumorales o tomografía.
Autoexamen testicular: paso a paso
Hazlo mensualmente:
- Relaja el escroto.
- Sujeta cada testículo entre pulgar y dedos y gíralo suavemente.
- Revisa bultos, dolor, agrandamientos o pesadez.
- Palpa la parte trasera (epidídimo), donde normalmente no hay masas.
- Si detectas algo inusual, consulta de inmediato.
Tratamientos por condición
- Infecciones (epididimitis/orquitis): antibióticos y antiinflamatorios, elevación escrotal.
- Hidrocele/quiste/espermatocele: observación o extracción quirúrgica si molesta o crece.
- Varicocele sintomático: cirugía si hay dolor o infertilidad.
- Torsión: cirugía urgente; restauración del flujo en menos de 6 horas salva el testículo.
- Cáncer: orquidectomía, radioterapia, quimioterapia según tipo y etapa.
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Perspectiva y prevención
Muchas causas de testículo más grande son tratables si se detectan a tiempo. La realización del autoexamen testicular y la consulta rápida ante síntomas son claves. En casos graves como torsión o cáncer, la acción precoz puede salvar la vida o preservar la fertilidad.
Mantener una buena higiene, evitar traumatismos y acudir a revisiones médicas regulares también ayuda. Nunca ignores señales del cuerpo: escuchar sus avisos y actuar pronto marca la diferencia.
Resumen: uno de tus testículos puede verse agrandado por diversas causas. Desde infecciones hasta condiciones graves como torsión o cáncer, el diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado pueden prevenir complicaciones. El autoexamen mensual es una herramienta clave en tu salud testicular.