Así es la vida: Íbamos a ofrecer una cena en casa
A mis padres les gusta mucho la ciudad de Las Vegas, y la han visitado varias veces. Hace unos años, durante unas vacaciones...
Íbamos a ofrecer una cena en casa, y nuestros invitados preguntaron qué tipo de vegetales prepararíamos.
—Pues calabaza de verano… —dijo mi prometida.
—¡Pero si estamos en invierno! —exclamé.
reddit.com
Cierto día, mi hija y yo estábamos buscando algo que ver en los canales de películas del sistema de cable, cuando de pronto, al ver a un actor, le pregunté:
—Oye, ¿no es ese el actor que salió en la película El paciente inglés, como novio de la enfermera?
Ella contestó:
—¿Qué la enfermera no era novia del paciente?
—No, el paciente era novio de la que salió en una película en la que se le muere el esposo en un accidente de avión, y que andaba con la esposa del que salió en La guerra de las galaxias.
—¡Ah, sí! —exclamó mi hija—. Y la enfermera es la que salió en Como agua para chocolate.
—Así es —dije—, junto con el que salió en una película de piratas, ¿no?
—Pues creo que sí, ¿pero entonces cómo se llaman?
—La verdad es que no tengo ni la menor idea —contesté.
Laura Rosalba del Valle, México
Cuando mis papás se estaban casando en el registro civil, después de ocho años de novios, el juez dijo:
—José Luis, ¿aceptas a Maritza Alicia como tu esposa?
Sorprendido, mi papá volteó a ver a mi mamá y preguntó en voz alta:
—¿Te llamas Alicia?
Olga Quiroz, México
Debido a que estudié en una universidad pública, tuve que prestar mi servicio social en una oficina del gobierno. Al finalizar la primera jornada laboral, mi jefe, muy contento, me dijo:
—Ojalá todos mis empleados trabajaran como usted.
Creyendo que se refería a mi buen desempeño, me entusiasmé mucho, hasta que él terminó la frase diciendo:
—Gratuitamente.
Fabián Álvarez, México
Tanto mi esposo como yo conducimos un automóvil rojo. Nuestra hija menor también tiene un coche rojo, al igual que nuestra hija mayor y su esposo. El que desentona es nuestro único hijo varón. Un día, él llamó por teléfono para decirme que pensaba comprarse un auto nuevo, que resultó ser de color rojo.
—Bueno —exclamé—, ¡parece que finalmente viste la luz!
—Es cierto —respondió mi hijo—. Estoy cansado de ser la camioneta negra de la familia.
Heather Denning, Canadá
A veces puede ser difícil distinguir entre sonidos. Por ejemplo, el otro día me soné la nariz y mi esposa, que estaba en la habitación contigua, gritó: “¿Qué dijiste?”.
Paul Swets, Estados Unidos
A mis padres les gusta mucho la ciudad de Las Vegas, y la han visitado varias veces. Hace unos años, durante unas vacaciones, viajamos a Italia a visitar a unos familiares. Estando en Venecia, aprovechamos para dar un paseo en góndola. No llevábamos ni cinco minutos a bordo de ella, cuando mi madre se volvió hacia mi padre y exclamó: “¡Vaya! ¡Es idéntico al hotel Venetian!”.
Laura Gobbo, Canadá