En los últimos años, el ñame ha ganado popularidad como un superalimento debido a sus numerosos beneficios para la salud. Uno de lo más destacados es su capacidad para proteger la memoria.
El ñame es un tubérculo de color blanco, amarillo o morado. Tiene una textura similar a la de la papa y un sabor ligeramente dulce. Es originario del África Occidental, pero cuyo cultivo se ha extendido hacia las zonas tropicales de América del Sur, las Antillas, China, el Sudeste Asiático y las Islas del Pacífico.
Es un alimento nutritivo que contiene una variedad de vitaminas, minerales y antioxidantes. Algunas de las vitaminas y minerales más importantes que se encuentran en el ñame incluyen:
Los beneficios de consumir ñame son muchos. Desde prevenir enfermedades del corazón hasta favorecer el tránsito intestinal. Además, al ser un concentrado de hidratos de carbono, el ñame es catalogado como un alimento energético y 100% saludable. Por lo tanto, es una buena elección para deportistas porque tiene también mucha fibra y proteínas vegetales.
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Pero, si por algo es famoso, es por su propiedad diosgenina, un compuesto que fortalece el crecimiento neuronal y la memoria, así como las habilidades del aprendizaje. Esto se logró determinar mediante un estudio publicado en el portal web del National Institute of Heart en 2017.
Realizado en Japón con 28 voluntarios sanos de entre 20 y 81 años evaluó el efecto de la diosgenina, un compuesto presente en el ñame, sobre la función cognitiva. Los participantes fueron asignados aleatoriamente a recibir extracto de ñame o un placebo durante 12 semanas.
Este estudio descubrió que la diosgenina facilita la reparación de las neuronas y reduciendo la degeneración de las mismas, mejorando la disfunción de la memoria en un modelo de la enfermedad del Alzheimer. Los resultados mostraron aumentos significativos en la puntuación total de la evaluación neurocognitiva, específicamente en la fluidez semántica, la cual mejoró de manera significativa. No se reportaron efectos adversos, sugiriendo que el tratamiento con extracto de ñame rico en diosgenina puede mejorar de manera segura la función cognitiva en adultos sanos.
A la hora de comerlo, es muy similar a otros tubérculos como la papa o el camote. Lo más común es comerlo después de hervirlo, hornearlo o asarlo a la parrilla. Hay quien, incluso, los fríe como ‘chips’ para comer entre horas.
Con información de Heraldo
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