Hace unos días se dió a conocer que la salud del Papa Francisco era delicada y este miércoles se ha indicado que será operado de emergencia por riesgo de una obstrucción intestinal.
El Vaticano explicó que “la operación, dispuesta en los últimos días por el equipo médico que asiste al papa, se ha hecho necesaria a causa de una hernia incisional incarcerada que está provocando síndromes suboclusivos recurrentes, dolorosos y que empeoran”. El Pontífice “estará ingresado varios días para permitir el curso posoperatorio normal y la recuperación funcional completa”, ha añadido la Santa Sede.
Y es que, durante estos dos últimos años, la salud del Papa se ha ido deteriorando, de hecho, a los fuertes dolores que sufre en su rodilla derecha que le obliga a andar con bastón o a trasladarse en silla de ruedas y por los que ha asegurado que no tiene pensando operarse, se suma su ingreso este pasado mes de marzo debido a “una pulmonía aguda” así como la reciente cancelación de su agenda este pasado 26 de mayo durante 24 horas debido a un fuerte episodio de fiebre y agotamiento.
¿Qué es una obstrucción intestinal?
De acuerdo a MedlinePlus, una obstrucción intestinal ocurre cuando la comida o las heces no pueden salir del intestino. La obstrucción puede ser completa o parcial. Hay muchas causas. Las más comunes son adherencias, hernias, cánceres y algunas medicinas.
Las obstrucciones intestinales pueden ocurrir en el intestino delgado o grueso, pero es más probable que se produzcan en el primero por enfermedad de Crohn, diverticulitis, cáncer de colon, de estómago o de ovarios, así como por cáncer avanzado de pulmón, mama o melanoma metastático.
Los síntomas incluyen:
- Dolor abdominal severo o retorcijones
- Vómitos
- Inflamación
- Gases fuertes
- Hinchazón del vientre
- Incapacidad para eliminar gases
- Estreñimiento
Una obstrucción intestinal completa es una emergencia médica, que por lo general se necesita cirugía. Mientras que una obstrucción parcial, puede ser suficiente en algunos pacientes con la adopción de una dieta baja en fibras.
¿Cómo se diagnostica una obstrucción intestinal?
Los especialistas ante la sospecha de obstrucción intestinal procederán al ingreso del paciente. Las pruebas son: examen médico del abdomen mediante palpación, uso de enema opaco, radiografía o TAC. En el caso de menores se suele recurrir a la ecografía.
Pautas dietéticas
Tras sufrir una obstrucción intestinal, se recomienda una dieta de líquidos claros (caldos o gelatinas) en los primeros días. Posteriormente se puede consumir leche, yogur, purés de pollo o batido de frutas. Una dieta baja en residuos se utiliza para reducir el tamaño o número de heces expulsadas, lo que puede mejorar los síntomas.
Se recomienda, por tanto, los granos refinados, frutas y verduras blandas o bien cocidas, aunque se permite el consumo en crudo de lechuga, pepinos o calabacín. Se pueden ingerir panes refinados, carnes o pescados cocinados, pero no pasta integral.
Las verduras permitidas son: espinacas, calabaza, berenjena, zanahorias, remolacha, patatas o espárragos. También se pueden ingerir albaricoques, plátanos, melón dulce, sandía, nectarinas, papayas, melocotones y ciruelas. Se deben reducir los azúcares y evitar los fritos, las salchichas, las pasas o la piña y los picantes.
Para prevenir este trastorno, cuando se sufre estreñimiento, es importante evitar las grasas, los fritos, los picantes, beber agua en abundancia, consumir verduras y frutas, y prescindir del alcohol y del tabaco, además de hacer ejercicio físico.
Con información de Alimente