¿Qué es y cómo se genera un sismo?
En el interior de la tierra ocurre un fracturamiento súbito cuando la energía acumulada excede la resistencia de las rocas.
Se produce cuando los impulsos magnéticos de la que afectan a cierto volumen de rocas, sobrepasan la resistencia de ésta, ocasionando un ruptura violenta y posteriormente, la liberación repentina de la energía acumulada.
Esta energía se propaga en forma de ondas sísmicas en todas direcciones.
La magnitud de un sismo se mide por medio de un número relacionado con la cantidad de energía liberada en el momento que ocurre.
Para calcularla se utilizan registros de uno o varios sismógrafos y se expresa mediante números arábigos, incluyendo fracciones decimales, cuando es necesario.
Un grado determinado de magnitud implica alrededor de 32 veces más energía liberada que el anterior. Esto es que, un sismo de magnitud 7 es 32 veces más energético que uno de 6 y cerca de 1000 veces más grande que uno de 5.
La primera escala de magnitud que surgió, fue dada por C.F. Richter en 1932. En la actualidad, considerando los diferentes tipos de sismos, la profundidad, etc., los sismólogos manejan varias escalas de magnitud.
La intensidad de un temblor está relacionada a un lugar determinado y se designa en función a los efectos causados en el hombre, en sus construcciones y en el terreno natural de la localidad.
Para asignar un grado de intensidad se emplea la escala de Mercalli modificada, la cual emplea números romanos, del I al XII.
Algún barco puede sufrir sacudidas, pero no es probable que resulte dañado.
Los tsunamis, además, cobran su tributo lejos del lugar del terremoto que los provocó.