¡Que no te limite la alergia!
Para mucha gente, los beneficios de tener un animalito en casa superan las molestias de los estornudos y los ojos llorosos. Si sigues algunas pautas básicas, podrás vivir cómodamente y disfrutar a tu mascota...
Para mucha gente, los beneficios de tener un animalito en casa superan las molestias de los estornudos y los ojos llorosos.
Si sigues algunas pautas básicas, podrás vivir cómodamente y disfrutar a tu mascota aunque seas alérgico.
Elige bien a tu amigo peludo
Tanto los gatos como los perros provocan alergias, pero los mininos las desencadenan más fácilmente. Los perros de pelo suave, como los poodle y los malteses, suelen ser menos alergénicos; sin embargo, hay que cortarles y cepillarles el pelo más a menudo porque les crece con rapidez.
Verifica si eres alérgico
Antes de tomar alguna decisión drástica, asegúrate de que eres alérgico a las mascotas. Pide a tu alergólogo que te haga una prueba de reacción a la caspa de perros y gatos. Las alergias son acumulativas, así que muchas personas son sensibles a más de un alergeno.
No gastes en lujos
Incluso esos gatos exóticos sin pelo pueden provocarle estornudos a alguien. No es tanto el pelo lo que irrita, sino unas proteínas microscópicas presentes en el sudor y la saliva de perros y gatos. Se volatilizan fácilmente. Caminar por un cuarto basta para agitarlas y causar estornudos. La caspa de mascotas, que está compuesta principalmente de pelo y piel muerta, también puede desencadenar reacciones.
Desempolva a menudo
Usa una aspiradora con un filtro de aire HEPA de 0.3 micras, que atrape la caspa y las proteínas animales. Pasa la aspiradora al menos una vez a la semana. Reemplaza las cortinas de tela y las alfombras, ya que retienen caspa de mascotas. Invierte en fundas para almohadas y cojines fáciles de lavar, y limpia las camas de todos tus animalitos al mismo tiempo.
Baña a tu mascota
Un baño de tres minutos reduce los alergenos más de 80 por ciento. Los productos anticaspa para mascotas no son más eficaces que un baño semanal. Usa siempre champú para gatos o perros, pues sus PH son distintos del nuestro. Acostumbrar a tu gato a un baño semanal es posible. Pide al veterinario unos tips para hacerlo.
Crea en tu casa una zona libre de mascotas
Tu dormitorio debe ser un refugio alejado de los alergenos. No permitas que tu gato o perro entre allí, y compra almohadas y cubrecamas nuevos. Las fundas impermeables para colchón son útiles también. Deja fuera del cuarto la ropa que usas para jugar con tu mascota. Si Duque o Bigotes está acostumbrado a dormir contigo, compra una cama para mascota muy cómoda, fórrala con una manta o ropa vieja tuya para que se sienta a gusto, y pon la cama fuera de tu dormitorio.
Dale un hogar propio
Acondiciona un rincón para tu mascota fuera de la casa, a fin de que pueda dormir allí parte del tiempo, y para reducir los alergenos y la caspa en el interior. Haz su refugio lo más tibio y cómodo que sea posible. Si tienes un perro, le será más fácil acostumbrarse a él porque los canes son habitantes natos de cuevas. Si es un gato, atráelo al refugio poniendo comida en él y un poco de hierba gatera.