Este año la Navidad será muy diferente, pero seguramente los regalos para animarnos un poco en esta pandemia no faltarán. Solo trata de evitar estos.
Este año la Navidad será muy diferente en comparación con los anteriores, pero los mexicanos no dejarán de lado los regalos. Según informes de Kantar, empresa especializada en el comportamiento del consumidor, el 34 por ciento de las familias declara que dará obsequios para animarse un poco en esta pandemia, mientras que el 17 por ciento comentó que llevará a cabo un intercambio navideño, pues es una una tradición familiar que no quieren perder.
Hacer buenos regalos no es fácil, pues se debe conocer aunque sea mínimamente a la persona, pero hay gente especialista en romper el corazón de sus familiares y amigos con los peores regalos del mundo.
Aunque dicen que no se deben juzgar los regalos, sino la intención, mejor te dejamos una lista de los peores objetos para regalar en Navidad, para que no seas esa persona que deja al otro pasmado por tan pésima elección.
Un obsequio tiene el objetivo de agradar, así que al dar ese tipo de objetos (sobre todo los de cocina) pareciera que envías al otro a realizar labores del hogar.
Además de sexista, son cosas para la casa y de uso común para todos los que viven bajo ese mismo techo, así que la persona no siente que fue un regalo expresamente para su disfrute.
Podrá ser algo práctico, y hasta necesario, pero desilusiona. En esta categoría entran sábanas, vasos, floreros, etc.
A menos de que sepas que ese olor es el favorito de la personas, mejor abstente de comprar ese producto, pues es muy difícil acertar con las fragancias. Piénsalo dos veces antes de cometer ese error sensorial.
No solo que para esa fecha ya estarías muy a destiempo con una clase de regalo así, sino que no es para nada práctico recibir de regalo decoraciones que se usan una sola vez al año.
En esta categoría también entrarían los suéteres navideños, pues aunque pareciera que son ideales para avivar el espíritu de la temporada, la realidad es que a casi nadie le gustan. ¡Imagínate que son conocidos como ‘Ugly christmas sweaters‘! (Suéteres feos navideños).
Nunca se sabe si la persona tiene tiempo de cuidarlos o si son de su gusto, así que no, no, no. ¡Y menos un perro! Recuerda que son seres vivos, no juguetes. Su cuidado implica responsabilidad y no todo el mundo está preparado para asumirla.
“Incorporar un perro o un gato a la familia es algo que influirá sobre el funcionamiento y las dinámicas familiares durante los siguientes 10 años o más. La decisión debe ser consensuada entre todos los miembros, que tienen que estar dispuestos a asumir su parte de responsabilidad en el cuidado del animal” explica Fundación Affinity.
¡Un clásico navideño, pero a nadie le hacen ilusión! ¿Recuerdas lo horrible que sentías cuando de niño te los obsequiaban? Pues no le hagas lo mismo a los demás a menos que sepas que los desea, pues es absolutamente deprimente recibir algo así, parece que quien regala no quiso esforzarse en agradar.
Aquí también entraría la ropa íntima, algo muy delicado y, además, difícil de mostrar ante familia y amigos.
A no ser que sea un apasionado del coaching, la meditación, el yoga o algo así mejor no hagas ese tipo de regalos, pues es como decirle al destinatario que algo está mal con su vida y ya es momento de que empiece a trabajar en ello.
Aquí también cabrían objetos deportivos, pues algunas personas creen que les están diciendo “gordas” sutilmente.
¿Acaso hay algo más impersonal?
Si ya tienes listos tus regalos esperamos que no sea ninguna de estas opciones, pero si entre tus regalos las incluiste, evítalas en los años siguientes, ya sabes por qué.
¿Lo Sabías?
