Reutilizar el aceite de freír: ¿riesgo para el cerebro?
Un estudio revela que el consumo de aceites recalentados puede provocar daño cerebral, entre otras afecciones crónicas.
Las investigaciones recientes sugieren que el uso repetido del aceite de freír podría tener un impacto negativo en la salud cerebral. Un estudio preliminar realizado por científicos de la Universidad de Illinois, el Hospital Universitario Vinayaka y la Universidad Central de Tamilnadu ha encontrado una posible relación entre la reutilización del aceite y la degeneración neuronal en ratas.
Para la realización de este estudio, sus autores tomaron un grupo de ratas hembra y las alimentaron durante 30 días con tres tipos de alimentos. Por un lado, un grupo control se alimentó con su dieta estándar, mientras que otros tomaron alimentos pasados por aceite nuevo o recalentado.
Pasado ese mes, se comprobó que las del último grupo experimentaron un incremento en los niveles de enzimas hepáticas. Esto se relaciona tanto con la inflamación como con el estrés oxidativo. Ambos son fenómenos que ya se habían relacionado con la costumbre de reutilizar el aceite de freír. De hecho, son algunas de las causas por las que puede producir cáncer o afecciones metabólicas. No obstante, estos científicos vieron algo más.
Esas modificaciones en el hígado afectaron a la forma en la que este órgano metaboliza las grasas. Por lo tanto, los ácidos grasos omega 3, conocidos por su gran efecto neuroprotector, no se podían transportar hacia el cerebro.
La consecuencia era una mayor degeneración neuronal, como se pudo comprobar en el análisis histológico del cerebro de las ratas. Igualmente, se vio afectación en las células del colon, que apunta a esa relación entre intestino y cerebro.
Si esto ocurriese también en humanos, podría desencadenar demencia o influir en el desarrollo de enfermedades como el alzheimer y el parkinson.
Es importante tener en cuenta que este estudio es preliminar y se ha realizado en ratas. Se necesita más investigación para determinar si estos resultados se pueden extrapolar a los humanos.
Sin embargo, este estudio proporciona una nueva perspectiva sobre los riesgos potenciales de reutilizar el aceite de freír. Es una buena práctica tomar medidas preventivas para proteger nuestra salud, especialmente la de nuestro cerebro.
Con información de Hipertextual y DW