¿Sabías que estas cosas fueron inventadas por mujeres?
Mary Anderson diseñó y patentó unos brazos de madera y goma que podía limpiar las gotas de lluvia de las ventanas al jalar una palanca en el auto.
Puedes darle las gracias a estas brillantes mentes por hacer del mundo lo que es hoy.
Ada Lovelace, nacida en 1815, hija del poeta Lord Byron, comenzó a acercarse a las matemáticas gracias a su madre, Lady Byron. Cuando tenía 17 años se hizo amiga de Charles Babbage, el famoso “padre de las computadoras”, quien se volvió su mentor.
En la traducción de un artículo sobre él, Lovelace agregó sus propias notas, triplicando la longitud de su artículo y publicándolo con sus iniciales: A. A. L.
Más tarde escribió sobre una máquina a la que se le podía cargar un código para calcular los números de Bernoulli, lo que muchos consideran como el primer algoritmo para una máquina y, por tanto, el primer programa para computadora.
Durante un viaje a Nueva York en 1903, Mary Anderson notó que un conductor no podía ver nada porque estaba nevando. En aquel entonces, los conductores debían detenerse y limpiar los cristales con la mano, por lo que entraba lluvia y nieve a sus vehículos. Entonces, Anderson diseñó y patentó unos brazos de madera y goma que podía limpiar las gotas de lluvia de las ventanas al jalar una palanca.
Sin embargo, muchos le dijeron que su invento era muy poco práctico y que nadie lo financiaría.
La canadiense Florence Lawrence es famosa por ser la primera “estrella de cine”. Sin embargo, sus contribuciones al mundo van mucho más allá de la cinematografía. Lawrence era aficionada a los coches, y diseñó el primer indicador de cambio de señales para auto. Su invento se colocaba en la parte trasera del vehículo y consistía en dos brazos que se levantaban con palancas para indicar hacia dónde se giraría.
También inventó una señal que indicaba el freno. Lamentablemente nunca patentó estos mecanismos, y murió después de comer veneno de hormiga al intentar suicidarse.
Elizabeth Magie, nacida en 1866, leyó Progreso y miseria de Henry George, en donde el autor proponía que sólo debería existir el impuesto sobre la renta, de manera que los terratenientes, capataces, patrones y dueños de grandes terrenos fueran quienes más tributaran. Pensando que el capitalismo empobrece a los más pobres y enriquece a los más ricos, Magie creó el Landlord’s game en 1904.
Los jugadores tenían dos opciones: podían elegir entre recibir una recompensa cada vez que los demás ganaran dinero, o podían tratar de arruinar al resto. Magie esperaba demostrar que la mejor opción era declararse contra el monopolio de la tierra, dentro del juego pero también fuera de él.
Desafortunadamente, un hombre sin oficio ni beneficio, Charles Darrow, le robó la idea y le vendió Monopoly a los Parker Brothers, quienes ganaron millones en regalías. Magie acusó a Darrow de plagio en los periódicos más importantes.
Allene Rosalind Jeanes trabajaba en el departamento de agricultura cuando una compañía de refrescos envió una muestra a su laboratorio para que investigara por qué la bebida se volvía pegajosa. Jeanes descubrió que la causa de que se hiciera más espesa era una bacteria que producía dextran, usado para espesar la sangre de los soldados heridos durante la guerra de Corea.
Jeanes descubrió que podía usarlo para hacer la goma de xantana, usada en alimentos y ciertos maquillajes, dándoles una mejor textura.
Sin un recubrimiento especial, es difícil ver a través del cristal porque refleja la luz. Aquí es donde entra Burr Blodgett, quien se convirtió en la primera mujer en doctorarse de física en 1926. Mientras trabajaba para General Electric, descubrió un método para crear un revestimiento de 44 capas de jabón de una molécula cada una (cuatro millonésimas de pulgada).
Usarlo sobre los cristales permitía que la luz pasara por ellos, eliminando gran parte del reflejo. Recibió la patente de su cristal en 1938.
En la segunda década del siglo pasado, Marie Van Brittan Brown y su esposo, el técnico electricista Albert Brown, tenían agendas muy distintas, por lo que a ambos les tocaba pasar mucho tiempo solos en su casa. Entonces, ella le pidió que le ayudara a crear un sistema de seguridad para sentirse más cómoda en su casa.
Juntos patentaron un circuito con una cámara que podía escanear el área circundante a su hogar y enviar imágenes a un televisor. Además, tenía un micrófono para hablarle a quien estuviera afuera, un radio para abrir la puerta y una alarma vinculada a la policía.
Las primeras bolsas de papel parecían conos o sobres, y no podían pararse sobre las mesas. Margaret Knight diseñó una máquina que doblaba papel para hacer bolsas con el fondo plano, aunque Charles Annan le robó la idea y la patentó sin darle crédito, por lo que lo llevó a juicio. Knight obtuvo su propia patente en 1871.
Mientras que James Watson y Francis Crick descubrieron la doble hélice del ADN, fue una mujer quien asentó sus descubrimientos. Rosalind Franklin fue una química y cristalógrafa inglesa quien, en 1952, diseñó una máquina capaz de capturar evidencia fotográfica sobre la forma del ADN. A esta primera fotografía se le conoce como Fotografía 51.
Pero, una vez más, alguien le robó el trabajo: Maurice Wilkins le mostró la fotografía a Watson y Crick, y el trabajo donde la incluyeron fue publicado en 1953. Franklin murió de cáncer ovárico en 1958, antes de que los científicos recibieran el premio Nobel, en 1962.
Como en 1900 no existían las cafeteras eléctricas, los baristas preparaban el café colocándolos dentro de una bolsa de tela para hacer la infusión con agua caliente. Para mejorar la calidad de la bebida, Melitta Benz hizo un filtro agujerando una olla y colocándole el papel dentro (usaba el papel de los libros viejos de sus hijos). Al verter el agua sobre los granos contenidos en el filtro, se hizo magia.
Los granos se mantenían en la taza, pero el sabor de la infusión era mucho mejor. En 1908 creó su propia compañía, Melitta, que ahora se dedica a vender filtros, cafeteras y algunos otros accesorios para preparar café.
En 1950, Bette Nesmith Graham trabajaba como secretaria (con esto mantenía a su hijo, quien luego fue guitarrista de The Monkees) aunque tenía una gran pasión por el arte. En aquel entonces, las secretarias debían escribir todo de nuevo si se equivocaban, pues no tenían ningún método sencillo para cubrir sus errores, así que usó sus conocimientos sobre pintura para desarrollar el corrector.
En 1956, desde su cocina, comenzó la compañía Mistake Out Company, en le que ayudaban su hijo y sus amigos. Cuando la despidieron por dedicarle más tiempo a esta compañía que a su trabajo como secretaria, Nesmith patentó su invento y le cambió el nombre a Liquid Paper.
Tomado de rd.com 16 Things You Never Knew Were Invented by Women