Corta el final de los espárragos, no necesitas cuchillo, un tip puede ser que lo tomes y lo dobles en el punto de quiebre y solo se parte.
Pela la zanahoria y pícala en rodajas.
Corta los limones y extrae el jugo hasta conseguir 1/8 de taza. Mezcla el jugo con el agua. Reserva.
Pica finamente el perejil o cilantro.
Pela y pica finamente el ajo.
En un sartén añade 1 cucharada de mantequilla, ya que se derritió, agrega la zanahoria y 1 diente de ajo picado, agrega sal y pimienta, deja que se cocine por 5 minutos con la tapa y reserva.
En el mismo sartén, agrega mantequilla y 1 diente de ajo picado, cocina por un minuto, agrega los espárragos, añade sal y pimienta, cocina de 5 a 7 minutos.
Seca el salmón con una toalla absorbente.
Salpimenta y lleva luego luego al fuego, no queremos que el pescado comience a sudar por la sal.
En un sartén con aceite de oliva bastante caliente, lleva el salmón por el lado de la piel, lleva el fuego a media baja.
Presiona con una espátula por 20 segundos para que no pierda su forma o se encoja. La piel protege al salmón para no sobrecocerse y secarse, además de que la piel queda deliciosa y crujiente.
Se cocinará poco a poco, cuando esté cocido ¾ partes dale la vuelta y cocina por el mismo tiempo, (sabrás que está cocido porque cambia de color) Aproximadamente lo cocinamos durante 9 minutos, si lo quieres término medio dale 2 o 3 minutos menos. Repite el mismo proceso con el otro filete.
En el mismo sartén, añade el ajo, cocina por ½ minuto, añade el jugo de limón, sal y pimienta, 2 minutos después retira del fuego; agrega 1 cucharada de mantequilla y revuelve, antes de que se derrita añade otra cucharada de mantequilla, y así hasta terminar con la mantequilla, esto para lograr la consistencia de la salsa. Por último, agrega el perejil.
Sirve las verduras y el salmón, báñalos con la salsa de mantequilla y disfruta.