Anteriormente sólo se hablaba de la salud física y mental, pero lo cierto es que la salud financiera también es importante para que una persona se sienta bien y tenga un mejor bienestar.
Por lo que tener una salud física, mental y financiera es fundamental para una vida plena. Cuando estos pilares están equilibrados, nos sentimos bien física, mentalmente y emocionalmente, y tenemos la capacidad de alcanzar nuestros objetivo.
De acuerdo a Forbes México desde hace tiempo en la Condusef sostiene que existe una epidemia silenciosa e invisible que ataca a millones de mexicanas y mexicanos sin respetar edad, nivel de ingreso, escolaridad, domicilio y tipo de trabajo: el estrés financiero.
Además agregan que la salud financiera tiene cuatro pilares:
- El primero tiene que ver con la posibilidad de cubrir día con día los gastos inherentes a la vida cotidiana.
- El segundo es poder enfrentar una emergencia con una cantidad mínima de reserva y/o seguros que cubran riesgos.
- La tercera es generar ingresos para ahorrar con un fin determinado a corto o mediano plazo.
- Finalmente, la última etapa es contar con los recursos y la planificación para proyectos de largo plazo incluido un retiro digno.
¿Qué es la salud financiera?
El bienestar financiero consiste en vivir sin preocupaciones ni angustias por cuestiones de dinero. Si la ansiedad y el estrés surgen de las deudas o de no ganar lo suficiente, obviamente la salud física y mental se resentirán.
Romper la conexión invisible entre los tres pilares de una vida plena alejará rápidamente a las personas de un estado de bienestar. Además de que muchas personas consideran que las finanzas personales sólo son relevantes para los ricos o empresarios, cuando en realidad es un tema que concierne a todas las personas, ya que el dinero es una herramienta neutral para la interacción y las transacciones.
Gestionar mal las finanzas acabará provocando estrés financiero, que repercutirá negativamente tanto en el bienestar físico y emocional de las personas.
Por qué la salud financiera debe considerarse un pilar para el bienestar general
La salud financiera es un componente importante del bienestar general. Cuando estamos financieramente sanos, tenemos la tranquilidad de saber que podemos cubrir nuestras necesidades básicas y alcanzar nuestros objetivos. Esto nos permite enfocarnos en otras áreas de nuestra vida, como la salud física y mental.
Para cuidar de la salud financiera, es importante:
- Desarrollar un presupuesto y cumplirlo.
- Ahorrar dinero regularmente.
- Invertir el dinero de forma inteligente.
- Protegerse de los riesgos financieros.
Cómo equilibrar
Una buena salud mental y física puede contribuir a una mejor salud financiera, y viceversa. Por eso, es importante trabajar para equilibrar los tres pilares.